La delegación de congresistas Demócratas de Texas envió una carta al presidente Joe Biden en la que le piden poner fin a la modificación a las normas fronterizas que impuso el gobernador Greg Abbott y que endurecen las inspecciones de vehículos comerciales.
La misiva la firmaron siete congresistas estadounidenses, encabezados por la representante de El Paso, Veronica Escobar. “Es inhumano, ya que los camioneros se ven obligados a esperar durante horas sin comida, agua o uso de los baños debido al aumento significativo en los tiempos de espera”, expresaron.
“Escribimos para expresar nuestra grave preocupación sobre el reciente decreto estatal por parte del gobernador de Texas, Greg Abbott, que envía elementos especiales a realizar inspecciones de vehículos comerciales que cruzan la frontera con EU”, destacaron los congresistas.
La misiva fue firmada por los legisladores Verónica Escobar, Joaquin Castro, Lloyd Doggett, Marc Veasey, Colin Allred, Henry Cuellar y Vicente Gonzalez.
En el documento exponen que las medidas fronterizas tomadas por Abbott impactan las políticas del gobierno de Biden que, aseguran, han buscado mejorar las cadenas de suministro, impulsar la creación de empleos, reducir los precios y asegurar el flujo comercial eficiente.
“Agradecemos la declaración reciente de la administración que critica esta política catastrófica y le pedimos que utilice un enfoque de todo el gobierno para poner fin a esta politización dañina de nuestra frontera que está perjudicando la economía de Texas y amenazando el sustento de las familias y empresas texanas“, solicitaron.
Además, alertaron que las medidas fronterizas ponen en jaque el desarrollo económico de la región y del país entero, pues “México es el mayor socio comercial de Texas, con un flujo de 442 mil millones de dólares en bienes intercambiados sólo en 2021, de los cuales 264 mil millones provienen de importaciones”.
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Plantearon que la industria de la región asegura que dos tercios de los productos frescos en Texas provienen de México, “muchos de los cuales ahora están esperando y, posiblemente, se están echando a perder, en los puntos de control donde los camiones están parados durante casi 30 horas”.
“La aplicación de estas inspecciones estatales está obstaculizando el movimiento de productos perecederos, así como de suministros médicos y de fabricación, que no solo son esenciales para las comunidades fronterizas de El Paso, Laredo, Pharr y Brownsville, sino para las empresas e industrias estadounidenses en todas partes”, puntualizaron.
