Barcelona se llevó un buen susto en su visita a Frankfurt, pero finalmente logró un empate 1-1 en el juego de Ida de los Cuartos de Final de la Europa League, lo que le deja la mesa servida para resolver la eliminatoria en el Camp Nou la próxima semana.
Fue un primer tiempo desconcertante para los azulgrana, que de milagro no se fueron al descanso en desventaja y por más de dos anotaciones.
El local abrumó, tomó la iniciativa y bloqueó el juego de posesión de los catalanes que se veían extraviados y sin respuesta, mientras el guardameta Marc-André Ter Stegen era amenazado una y otra vez.
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De hecho el VAR tuvo que echar para atrás un penalti por una acción en la que Sergio Busquets se barrió en el área, y aunque sacó limpiamente el balón, el árbitro marcó falta en primera instancia.
En el arranque de la segunda mitad apareció cierta justicia por lo que se había visto en la cancha, y con un poderoso disparo de fuera del área Ansgar Knauff abrió el marcador (48’). Un verdadero golazo.
Xavi no esperó más y mandó a la cancha a Ousmane Dembélé y Frenkie de Jong, cambios que le rindieron frutos casi de inmediato. Se combinaron en una serie de paredes para dejar dentro del área a Ferran Torres, quien definió con clase el 1-1 al minuto 66’.
El anfitrión se quedó con 10 hombres pero el Barça ya no logró darle la vuelta en el marcador, pero salió bien librado con el 1-1, pues en casa podrá sellar su pase a semifinales de la Europa League.
