Por Montserrat Peralta
En la actual administración federal, ocho migrantes han muerto en estaciones operadas por el Instituto Nacional de Migración (INM).
De acuerdo con información obtenida por Latinus vía transparencia, las defunciones registradas entre el 1 de diciembre de 2018 y octubre de 2021 fueron en instalaciones ubicadas en la Ciudad de México, Chiapas, Nuevo León, Tabasco y Michoacán.
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El 15 de mayo de 2019, una niña guatemalteca de 10 años murió por un “trauma cerrado de abdomen”. La menor y su madre estaban en la estación migratoria de Iztapalapa, en la Ciudad de México, tras haber sido trasladadas desde Chihuahua. Su cuerpo fue embalsamado y entregado a las autoridades de Guatemala.
También en 2019, dos hombres migrantes de Haití y Ghana murieron en la estación de Tapachula, Chiapas. Ambos sufrieron un infarto al miocardio. El destino del cuerpo del primero fue una fosa común en el Panteón Jardín y el segundo fue entregado a una asociación de ghaneses en la Ciudad de México.
Otros dos hombres de El Salvador, de 40 y 58 años, también murieron de infartos al miocardio en las estaciones de Monterrey, Nuevo León, y Morelia, Michoacán. El primer deceso ocurrió en 2019 y el segundo en 2021, de acuerdo con la información entregada por el INM.
“La situación de las personas privadas de la libertad en las Estaciones Migratorias es inhumana ya que el Instituto Nacional de Migración actúa con impunidad y abuso de poder aprovechándose de la incomunicación y falta de información de las personas, de la opacidad y la nula vigilancia a la que está sometido, más aún durante la pandemia”, señaló en un comunicado la organización Sin Fronteras.
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En el recuento de casos entregados por el INM también se encuentra el de un hombre hondureño que en 2020 murió a causa de “lesiones provocadas por el extranjero” en Guadalupe, Nuevo León, y su cadáver se envió a una fosa común. En ese mismo año, un guatemalteco, de 31 años, falleció en Tenosique, Tabasco, a causa de “asfixia por inhalación de monóxido de carbono”. Fue enterrado en la misma localidad.
Destaca también el caso de una mujer estadounidense que murió en 2021 por “congestión visceral generalizada” en la estación de Iztapalapa, en la Ciudad de México. Su cuerpo fue embalsamado y enviado a las autoridades consulares de Estados Unidos.
De acuerdo con el Boletín Mensual de Estadísticas Migratorias de 2021 de la Unidad de Política Migratoria, Registro e Identidad de Personas, de enero a octubre de 2021 se presentaron 228 mil 115 registros de extranjeros presentados ante la autoridad migratoria. De este total, 84.5% correspondió a centroamericanos que en su mayoría provienen de Guatemala, Honduras y El Salvador.
Además de la violencia que ejercen grupos del crimen organizado en contra de los migrantes y de las agresiones de los cuerpos de seguridad pública, está el endurecimiento de la política migratoria con la reactivación del programa “Quédate en México”, que lleva a las personas solicitantes de asilo a Estados Unidos a permanecer en suelo mexicano mientras se resuelve su petición.
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Las detenciones y repatriaciones tampoco han cesado. De enero a octubre de 2021 se registraron 82 mil 627 eventos de extranjeros devueltos por la autoridad migratoria mexicana.
