AP.- Las autoridades de Colorado buscaron este sábado a dos personas reportadas como desaparecidas por un incendio forestal que azotó a los suburbios de Denver por fuertes vientos provocados por la temporada invernal; cientos de casas terminaron destruidas y miles de personas trataron de rescatar sus pertenencias durante el incendio.
Denver, la capital del estado, se vio afectada el pasado jueves por varios incendios fuera de control que obligaron a los habitantes a desalojar sus viviendas. En los primeros reportes, las autoridades dijeron que no habían desaparecidos en el área afectada, sin embargo, Jennifer Churchill, la portavoz del condado de Boulder, dio a conocer este día que los rescatistas estaban intentando localizar a dos personas reportadas como desparecidas.
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Churchill dijo que la búsqueda comenzó luego de que bomberos, oficiales y otros funcionarios ubicaran a cientos de personas que se vieron involucradas y fueron víctimas de la catástrofe. La vocera se negó a proporcionar detalles sobre los desaparecidos en cuestión, no dijo donde fueron vistos por última vez, ni se refirió a los esfuerzos por encontrarlos.
La noticia se produjo cuando un vertido nocturno de nieve y temperaturas gélidas agravaron este sábado la miseria de cientos de residentes de Colorado que comenzaron el Año Nuevo tratando de salvar lo que queda de sus hogares.
Al menos seis pulgadas (0.15 metros) de nieve y temperaturas de un sólo dígito proyectan una escena inquietante en medio de los restos aún humeantes de las casas destruidas por el incendio forestal del jueves que atravesó el área suburbana que se encuentra entre Denver y Boulder. A pesar del impactante cambio de clima, el olor a humo aún impregnaba las calles vacías bloqueadas por tropas de la Guardia Nacional en Humvees.
Para los miles de residentes cuyas casas sobrevivieron a la conflagración, los voluntarios de los refugios de la Cruz Roja distribuyeron calentadores eléctricos mientras los equipos de servicios públicos luchaban por restaurar el gas natural y la electricidad.
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Al menos siete personas resultaron heridas en el incendio forestal que estalló en Louisville y Superior y sus alrededores, pueblos vecinos a unas 20 millas (32 kilómetros) al noroeste de Denver con una población combinada de 34 mil habitantes. Se temía que se destruyeran más de 500 viviendas.
Las familias que se vieron obligadas a huir de las llamas sin previo aviso comenzaron a regresar a sus vecindarios el viernes para encontrar un mosaico de devastación. En algunas cuadras, las casas reducidas a ruinas humeantes se encontraban junto a otras prácticamente indemnes por los incendios.
