Gabriel Boric, el exlíder estudiantil de 35 años que gobernará Chile con una visión ecologista, feminista y regionalista

Gabriel Boric, el millenial que busca darle a Chile una visión ecologista, feminista y regionalista
Fue candidato presidencial por la coalición Apruebo Dignidad. Foto: EFE, Alberto Valdes.

AP.- Gabriel Boric, un millennial izquierdista que saltó a la fama durante las protestas contra el gobierno, resultó electo este domingo como el próximo presidente de Chile, luego de una contundente campaña contra el político partidario del libre mercado, José Antonio Kast, quien ha sido comparado con Donald Trump.

Con el 56% de los votos Boric derrotó al legislador Kast, quien intentó infructuosamente asustar a los votantes de que su inexperto oponente se convertiría en un títere de sus aliados en el Partido Comunista de Chile y que cambiaría el historial del país como la economía más estable de Latinoamérica.

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A los 35 años, Boric se convertirá en el presidente más joven de Chile al asumir el cargo en marzo. Es el segundo millennial en liderar un país de América Latina, después de Nayib Bukele de El Salvador. Sólo Giacomo Simoncini, jefe de Estado de la ciudad de San Marino, en Europa, es más joven que él.

El ambicioso objetivo de Boric es introducir una socialdemocracia, al estilo europeo, que expandiría los derechos económicos y políticos para atacar la desigualdad persistente, sin virar hacia el autoritarismo adoptado por gran parte de la izquierda en Latinoamérica, desde Cuba hasta Venezuela.

Nació el 11 de febrero de 1986, en Punta Arenas. Es egresado de la licenciatura de Derecho por la Universidad de Chile y, durante su período como estudiante, fue ayudante de las cátedras de Historia Institucional de Chile, Teoría de la Justicia y Derecho Internacional de los Derechos Humanos.

En esa época Boric también despuntó como líder estudiantil e ingresó al colectivo político Izquierda Autónoma y en 2016 fundó el Movimiento Autonomista. Desde antes de sus días universitarios, entre 1999 y el año 2000, participó en la refundación de la Federación de Estudiantes Secundarios de Punta Arenas.

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Boric es un crítico acérrimo del modelo neoliberal instalado durante la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990) y consolidado luego en la transición.

El perfil del que será el mandatario más joven del país latinoamericano es un Estado del bienestar, con acento ecologista, feminista y regionalista.

“Si Chile fue la cuna del neoliberalismo en Latinoamérica, también será su tumba”, suele decir en sus mítines el exdiputado del bloque izquierdista Apruebo Dignidad, integrado por el Frente Amplio y el Partido Comunista.

Durante 2012, tras el triunfo de la lista “Creamos Izquierda”, asumió como presidente de la Fech, sucediendo en el cargo a Camila Vallejo Dowling quien es diputada por el Distrito 12 y quien también fuera líder estudiantil.

A partir de los hechos producidos por el “estallido social” de octubre de 2019, participó en la firma del “Acuerdo por la Paz Social y la Nueva Constitución”, suscrito el 15 de noviembre del mismo año, y que dio pie a un proceso constituyente en Chile.

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Boric se compromete a combatir la desigualdad

En medio de una multitud de simpatizantes, Boric saltó sobre una valla de metal para llegar al escenario donde inició su conmovedor discurso de victoria, en lengua mapuche, ante miles de simpatizantes, en su mayoría jóvenes.

El presidente electo, barbudo y con gafas, destacó las posiciones progresistas que lanzó. durante la campaña, incluida la promesa de luchar contra el cambio climático bloqueando un proyecto minero propuesto en la que es la nación productora de cobre más grande del mundo.

También prometió acabar con el sistema privado de pensiones de Chile, sello distintivo del modelo económico neoliberal impuesto por la dictadura del general Augusto Pinochet.

“Somos una generación que surgió en la vida pública exigiendo que nuestros derechos sean respetados como derechos y no tratados como bienes de consumo o un negocio”, dijo Boric. “Sabemos que sigue habiendo justicia para los ricos y justicia para los pobres, y ya no permitiremos que los pobres sigan pagando el precio de la desigualdad de Chile”.

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También dio un extenso saludo a las mujeres chilenas, un bloque de votantes clave que temía que una victoria de Kast hiciera retroceder años de avances constantes. Les prometió que serán “protagonistas” de un gobierno que buscará “dejar atrás de una vez por todas la herencia patriarcal de nuestra sociedad”.

En el metro de Santiago, donde un alza de tarifas en 2019 desencadenó una ola de protestas a nivel nacional, que expusieron las deficiencias del modelo de libre mercado de Chile, jóvenes partidarios de Boric, algunos de ellos con banderas blasonadas con el nombre del candidato, saltaban y gritaban al unísono mientras se dirigían al centro de la ciudad para unirse a los miles congregados para escuchar el discurso de victoria del presidente electo.

Con información de AP

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