AP.- Danny Fenster, el periodista estadounidense que pasó casi seis meses en una cárcel de Birmania, fue liberado este lunes luego de haber estado bajo la custodia del Ejército. Apenas hace una semana Fenster había sido sentenciado a 11 años de trabajos forzados.
El periodista fue liberado y entregado al exdiplomático estadounidense, Bill Richardson, quien fue parte fundamental en las negociaciones con el país asiático. Los dos aterrizaron en Doha, Qatar, luego de haber dejado Birmania.
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“Me siento bien físicamente”, dijo un Fenster barbudo, con pantalones holgados y un gorro a la cadena Al Jazeera. “Son las mismas privaciones y las mismas cosas que vienen con cualquier forma de encarcelamiento. Te vuelves un poco loco. Cuanto más se prolonga, más preocupado estás de que nunca va a terminar”, reconoció.
Mientras estaba encarcelado, Fenster le dijo a su abogado que creía tener Covid-19, aunque las autoridades penitenciarias lo negaron.
Fenster, editor en jefe de la revista en línea Frontier Myanmar, fue condenado el viernes pasado por difundir información falsa o incendiaria, contactar organizaciones ilegales y violar las regulaciones de visas. Días antes de su condena, se enteró de que había sido acusado de violaciones adicionales de las leyes de terrorismo y traición que lo ponían en riesgo de una sentencia de cadena perpetua aún más larga.
Junto con él, más de 100 periodistas, funcionarios de los medios de comunicación o editores han sido detenidos desde que los militares derrocaron al gobierno electo de la política ganadora del premio Nobel, Aung San Suu Kyi en febrero del presente año.
‘’Este es el día que esperas que llegue cuando haces este trabajo’’, dijo a través de un comunicado Richardson, ex gobernador de Nuevo México y ex embajador ante las Naciones Unidas. ‘’Estamos muy agradecidos de que Danny finalmente pueda reencontrarse con sus seres queridos, quienes han estado defendiéndolo todo este tiempo’’.
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Fenster estuvo detenido desde que fue arrestado en el Aeropuerto Internacional de Yangon el 24 de mayo, cuando se dirigía a Detroit para ver a su familia.
“Estamos muy contentos de que Danny haya sido liberado y esté de camino a casa; no podemos esperar a tenerlo en nuestros brazos”, dijo su familia en un comunicado. “Estamos tremendamente agradecidos a todas las personas que ayudaron a asegurar su liberación, especialmente al Embajador Richardson, así como a nuestros amigos y al público que expresaron su apoyo’’.
Las acusaciones exactas contra Fenster nunca fueron claras, pero gran parte del caso de la fiscalía parecía depender de demostrar que era empleado de otro sitio de noticias en línea que se ordenó cerrar este año durante una ofensiva contra los medios de comunicación tras la toma del poder por parte de los militares. Fenster solía trabajar para el sitio, pero dejó ese trabajo el año pasado.
Thomas Kean, editor de Frontier Myanmar, dijo que Fenster era ‘’uno de los muchos periodistas en Birmania que han sido arrestados injustamente sólo por hacer su trabajo desde el golpe de febrero’’.
Según la ONU, al menos 126 periodistas, funcionarios de medios o editores han sido detenidos por el ejército desde la toma de posesión y 47 permanecen bajo custodia, aunque no todos han sido acusados.
Shawn Crispin, representante del Comité para la Protección de los Periodistas en el sudeste asiático, dijo que Fenster “nunca debió haber sido encarcelado o sentenciado por cargos falsos en primer lugar”.
“El régimen militar de Birmania debe dejar de utilizar a los periodistas como peones en sus juegos cínicos y liberar a todos los demás reporteros que aún languidecen tras las rejas por cargos falsos”, agregó Crispin.
