El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, condenó este domingo el ataque contra el primer ministro iraquí, Mustafa al Kazemi, y ofreció la ayuda de Washington para asistir a las fuerzas de seguridad iraquíes mientras intentan identificar a los responsables.
En un comunicado, Biden condenó lo que consideró un “ataque terrorista” contra Al Kazemi y dijo sentirse “aliviado” de que haya salido ileso del ataque con un dron bomba dirigido a primera hora de este domingo contra su residencia en el centro de Bagdad.
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“Los autores de este ataque terrorista contra el Estado iraquí deben rendir cuentas. Condeno en los términos más enérgicos a quienes utilizan la violencia para socavar el proceso democrático de Irak“, manifestó Biden.
Además, anunció que ya ha dado instrucciones a su equipo de seguridad nacional para que dé “toda” la asistencia que sea necesaria a las fuerzas de seguridad iraquíes mientras investigan este ataque e identifican a los responsables.
El comunicado de las fuerzas de seguridad de Irak, difundido por medios de comunicación operados por el Estado, detalló que el intento fallido de asesinato fue con “un dron que trató de dar en su residencia en la Zona Verde”.
El ataque contra Al Kazemi se produce en un momento de tensión en Irak tras los choques violentos entre manifestantes y policías durante una manifestación el pasado viernes en Bagdad, frente a la propia Zona Verde, contra los resultados de las elecciones legislativas del pasado 10 de octubre.
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Los enfrentamientos dejaron dos personas muertas y más de un centenar heridas, muchas de ellas policías, lo que provocó una airada condena de los líderes de las milicias proiraníes de Irak, que en los pasados comicios perdieron casi dos tercios de sus escaños y rechazan los resultados.
