Mauricio Macri, expresidente de Argentina, no se presentará ante el juez que lo investiga por presunto espionaje

macri-argentina-espionaje-efe
Foto: EFE

EFE.- El expresidente argentino Mauricio Macri (2015-2019) no se presentará este miércoles ante el juez que lo citó a prestar declaración indagatoria en una causa que le investiga por el presunto espionaje ilegal a las familias de los 44 tripulantes del submarino ARA San Juan de la Armada, que desapareció en noviembre de 2017 y fue hallado hundido un año después.

“No me presentaré mañana hasta que los planteos que hará mi abogado sean resueltos para garantizarme el debido proceso y la defensa en juicio”, dijo Macri este martes a través de su cuenta en Twitter.

Te puede interesar: Pese al aumento de contagios por Covid-19, El Salvador habilita vacunas para extranjeros

El pasado 1 de octubre, el juez Martín Bava, a cargo del Juzgado Federal de la localidad bonaerense de Dolores, resolvió citar a Macri para que preste declaración indagatoria -primero el 7 de octubre y luego el día 20- y le prohibió salir del país, aunque en ese momento el expresidente estaba fuera de Argentina.

Según Macri, quien retornó a su país en las últimas horas, el magistrado es “manifiestamente incompetente” y “funcional a los intereses oficialistas”.

“El juez Bava vulneró mis garantías desde el primer minuto y me involucró en una causa que no corresponde investigar en Dolores y en la que no tengo nada que ver. Se trata, según me explicó mi abogado, de una imputación arbitraria donde se busca perseguirme”, afirmó el exmandatario.

Según el auto de citación a declarar, a Macri se le imputa haber presuntamente ordenado y posibilitado, desde su cargo de presidente, la realización “sistemática” de tareas ilegales de inteligencia entre diciembre de 2017 y finales de 2018.

El presunto espionaje apuntaba, según la investigación judicial, a obtener datos personales e información de los familiares y allegados de los tripulantes del submarino ARA San Juan.

Te puede interesar: Exmilitares irrumpen en el Congreso de Guatemala para exigir pagos por haber combatido la guerrilla

Esas acciones, según la resolución judicial de citación a indagatoria, “buscaban influir en la situación política e institucional del país, puntualmente respecto a los reclamos” que realizaban los familiares por el hundimiento del submarino, pero también apuntaban a “conocer sus actividades, los lugares donde se reunían, sus datos personales y los de su entorno”.

Macri aseguró este martes que no tiene “nada que ver” con esta causa judicial y que “jamás” espió ni pidió que se espiara a las familias de los tripulantes del submarino. “Para perseguirme, usan el dolor de los familiares de una tragedia como la que vivimos con el ARA San Juan“, afirmó.

El exmandatario dijo que “siempre” estuvo y estará a disposición de la Justicia, pero que no permitirá que “se violen derechos y se abuse del poder con intenciones políticas que tiñen la verdad”.

“Seguiré presentándome en la Justicia como siempre lo hice, toda las veces que haga falta, pero no por ello dejaré de plantear y cuestionar todas las decisiones arbitrarias que violen los derechos que nos amparan a todos los ciudadanos”, afirmó el expresidente.

Te puede interesar: Ecuador vive su primer día de excepción para frenar al narco bajo un fuerte despliegue de Fuerzas Armadas

“Por todo eso, mi abogado hará todos los planteos que correspondan para corregir esta situación y oportunamente, de ser necesario, me presentaré para responder, como siempre lo hice, estas falsas acusaciones”, añadió.

En septiembre de 2020, la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), ya con el peronista Alberto Fernández como presidente, denunció que el anterior gobierno hizo espionaje ilegal sobre familiares de los tripulantes del submarino.

La denuncia alcanza, además de a Macri, a quien fuera su jefe de inteligencia, Gustavo Arribas, y su segunda, Silvia Majdalani, ambos ya procesados en esta causa.

El ARA San Juan, que pertenecía a la Armada y desapareció en noviembre de 2017 con 44 tripulantes a bordo, fue hallado un año y dos días después de perderse su rastro mediante un operativo de la empresa estadounidense Ocean Infinity, aunque sus restos, desmembrados en varias partes, y los cadáveres de sus tripulantes, nunca fueron reflotados.

Casi tres años después del hallazgo del submarino prosigue la investigación judicial para conocer qué le ocurrió, así como detectar si hubo irregularidades en su desaparición y búsqueda.

En 2019, una comisión investigadora del Parlamento determinó que hubo “responsabilidades compartidas” en la cadena de mando de la Armada, y en marzo pasado un Consejo de Guerra de la Armada sancionó a varios oficiales. 

Comparte esta nota