El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este viernes que las obras que impulsa su gobierno deberán estar terminadas antes de 2024, esto debido a que, en 2023, el país “va a estar bastante caliente, políticamente hablando”
“Ya no tengo más tiempo. En diciembre del 23 además va a estar el país bastante caliente, políticamente hablando; ya van a estar los candidatos para el 24, entonces ya no podemos pensar en el 24, tenemos que terminar en el 23”, dijo López Obrador durante su recorrido por Durango.
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El presidente aseguró que, por una reforma constitucional “le quitaron” dos meses a su gobierno, por lo que terminará su mandato en septiembre de 2024.
“Yo estoy pensando terminar todas las obras para finales del 23; yo voy a terminar si así lo decide el pueblo, el creador, la naturaleza, la ciencia, en septiembre del 24. Termina mi periodo, mi mandato, a finales de septiembre”, añadió López Obrador.
Los principales proyectos del actual gobierno son el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), ubicado en el Estado de México; el Tren Maya, que recorrerá el sureste del país, y la refinería de Dos Bocas, que estará en Tabasco.
López Obrador se ha comprometido a inaugurar tanto el nuevo aeropuerto como la refinería de Dos Bocas el próximo año, mientras que prevé que el Tren Maya esté listo en 2023.
A estos proyectos se suman la conclusión del Tren Interurbano México-Toluca, iniciado en el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto; el Tren Transístmico, que pretende conectar los puertos de Salina Cruz, Oaxaca, y Coatzacoalcos, Veracruz, y el nuevo aeropuerto de Tulum, Quintana Roo.
A inicios de septiembre, el presidente López Obrador presentó su tercer informe de gobierno y, ese mismo día, el titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Adán Augusto López, entregó el documento al Congreso de la Unión, en representación del jefe del Ejecutivo.
En respuesta, partidos de oposición reaccionaron al tercer informe y coincidieron en que se emitió un discurso alejado de la realidad y señalaron que no se reconoció la grave crisis social y de seguridad que prevalece en México.
