La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) determinó aumentar 25 puntos base el objetivo de la tasa de interés interbancaria, a un día, hasta el nivel de 4.75%.
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Los efectos del cambio en la tasa de interés se darán partir del 1 de octubre, con el fin de evitar riesgos inflacionarios, para lo que “se consideró necesario reforzar la postura monetaria, ajustándola a la trayectoria que se requiere para que la inflación converja a su meta de 3% en el horizonte de pronóstico”.
A favor de la decisión votaron los subgobernadores Alejandro Díaz de León Carrillo, Irene Espinosa Cantellano, Galia Borja Gómez y Jonathan Heath; sólo Gerardo Esquivel Hernández votó por mantener el objetivo en 4.50%.
Aunque la recuperación de la economía mexicana continuó durante el tercer trimestre del año, y el Banxico espera que esta tendencia se mantenga para el resto del año y 2022, aun “se mantiene incertidumbre en relación a la pandemia y se prevén condiciones de holgura, con marcadas diferencias entre sectores”.
“Las presiones inflacionarias globales y los cuellos de botella en la producción continúan afectando a la inflación general y subyacente, que registraron variaciones anuales de 5.87% y 4.92% en la primera quincena de septiembre, respectivamente”, explicó la Junta.
Además, se determinó incrementar las expectativas de inflación general y subyacente para 2021, así como para los próximos 12 meses y para 2022. Sin embargo, las de largo plazo se mantuvieron estables en niveles superiores a la meta.
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La Junta del Banxico determinó elevar 0.2% y 0.5% las expectativas de inflación general para el tercer y cuarto trimestre del 2021, dejándolas en 5.8% y 6.2%, respectivamente.
Hacia 2022 estimó que se iniciará el año con una inflación de 5.6%, para cerrar en 3.4% y sería hasta el tercer trimestre de 2023 cuando se acerque más a la meta del banco central y quede en 3.1%.
“Se prevé que la medición anual de la inflación general y subyacente disminuya especialmente a partir de un año y que converja a la meta de 3% hacia finales del horizonte de pronóstico”, explicó el Banxico.
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Los riesgos inflacionarios están relacionados con presiones externas, de costos, persistencia en la inflación subyacente, depreciación cambiaria y el aumentos de precios agropecuarios.
