Reuters.- Veinte años después de que aviones secuestrados se estrellaran contra el World Trade Center de la ciudad de Nueva York y el Pentágono en las afueras de Washington, los estadounidenses honran las casi 3 mil vidas perdidas el 11 de septiembre de 2001 y reflexionan sobre cómo los ataques han moldeado la visión que tiene el país del mundo y de sí mismo.
El momento central de los eventos del sábado es una visita del presidente estadounidense Joe Biden a los tres sitios asociados con los ataques.
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Irá a la zona cero en el bajo Manhattan; al Pentágono en Arlington, Virginia; y a Shanksville, Pennsylvania, donde se estrelló el Vuelo 93 de United Airlines después de que los pasajeros intentaran recuperar el control del avión secuestrado.
Las conmemoraciones se han convertido en una tradición anual, pero este sábado adquiere un significado especial, 20 años después de la mañana que muchos ven como un punto de inflexión en la historia de Estados Unidos, un día que les dio a los estadounidenses una sensación de vulnerabilidad que ha influido profundamente en la vida política del país desde entonces.
En un doloroso recordatorio de esos cambios, hace sólo unas semanas, las fuerzas estadounidenses y aliadas completaron una retirada caótica de la guerra que Estados Unidos inició en Afganistán en represalia por los ataques, que se convirtió en la guerra más larga en la historia de EU.
Clifford Chanin, vicepresidente ejecutivo del Museo y Memorial Nacional del 11 de septiembre, construido en el lugar del ataque al World Trade Center, dijo que el hito de las dos décadas serviría como un “momento de gran emoción” para el país, un momento para considerar “dónde hemos estado y hacia dónde nos dirigimos”.
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“Por supuesto, estamos en medio de otro evento inimaginable en este momento con la pandemia de Covid, pero si el 11 de septiembre nos trae algo en términos de lo que sucedió aquí y en los otros sitios de ataque, es un mensaje de resiliencia”, dijo Chanin a los periodistas esta semana.
En la ciudad de Nueva York, la ceremonia en el Memorial del 11 de septiembre comenzó con un momento de silencio a las 8:46 am, la hora exacta en que el primer avión voló hacia una de las torres gemelas del World Trade Center.
Luego, los familiares recitarán los nombres de 2 mil 977 víctimas, un ritual anual que durará unas cuatro horas.
Al atardecer del sábado, se reflejará la forma de las torres caídas. Este año, edificios en todo Manhattan, incluidos el Empire State Building y el Lincoln Center Plaza, se unirán a la conmemoración iluminando sus fachadas en azul.
