El gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, aseguró este jueves que el gobierno estatal sí sabía de la alerta sobre el desbordamiento del río Tula. Sin embargo, dijo que “nunca se supo de las magnitudes” del siniestro que iba a provocar, el cual dejó 14 muertos en el municipio.
El mandatario refirió que, aunque ya antes se habían producido inundaciones, nunca había sucedido “a ese nivel”, en referencia a los tres metros de altura que alcanzó el agua.
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“Cayó una cantidad de agua que fue impresionante. Y repito: no es el agua que haya caído en Tula, es el agua que cayó en toda la región metropolitana del Valle de México, Ciudad de México y Estado de México“, dijo el gobernador en entrevista con Azucena Uresti en RadioFórmula.
También recalcó que la inundación es un fenómeno “súbito” que “no se puede calcular fácilmente”, y agregó que las autoridades del hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en el que murieron los 14 pacientes, actuaron debidamente.
“Yo creo que adivinos no pueden ser, yo vi a Zoé Robledo todo el lunes en el rescate del personal. No me parece que, en plena contingencia, cuando estamos en pleno rescate, estemos echando bolitas los unos a otros”, manifestó.
Omar Fayad informó que, hasta esta mañana, 150 personas habían sido desalojadas y cerca de mil 500 resultaron afectadas por el desbordamiento del Río Salado.
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El alcalde de Tula, Manuel Hernández Badillo, aseguró que fue alertado por el Servicio Metereológico Nacional (SMN) desde el viernes pasado. Sin embargo, dijo que la sociedad “no tenía claras la dimensiones de la inundación”.
“No es culpa de nadie, es una situación inédita que nos agarra mal parados”, afirmó el alcalde también en entrevista con Azucena Uresti.
Esta mañana, la coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, afirmó que sí se emitió una alerta de evacuación a la población en Tula.
Además, aseguró que el gobierno no necesita del Fonden ni de ningún otro fideicomiso para atender a los damnificados que han dejado los desastres naturales en el país.
