El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, alertó este martes que la contaminación del aire genera cada año siete millones de muertes prematuras, de las cuales, 600 mil son de menores de edad. Este número, advirtió, podría duplicarse para 2050 si no se toman las medidas adecuadas.
La mayoría de estos decesos, comentó António Guterres, ocurren en países de ingresos bajos y medios, así como en los barrios más pobres de las naciones más ricas.
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La ONU también señala que nueve de cada diez personas en el mundo respiran aire contaminado. Una de las razones es la pobreza, que obliga a la población que vive bajo estas condiciones a asentarse cerca de fábricas o carreteras, principales fuentes contaminantes.
Datos de las Naciones Unidas señalan que, en todo el mundo, 3 mil millones de personas queman combustibles sólidos o queroseno para cocinar, calentarse o alumbrar espacios, lo que aumenta los niveles de contaminación.
“Como tantos otros males que sufren nuestras sociedades, la contaminación del aire refleja las desigualdades presentes a escala mundial (…). La contaminación que amenaza nuestra salud es también el motor de la crisis climática”, declaró el titular de la ONU en un mensaje con motivo del Día Internacional del Aire Limpio por un Cielo Azul.
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Para mitigar la contaminación del aire, António Guterres pidió a los gobiernos del mundo establecer normas más estrictas para las emisiones generadas por vehículos, centrales eléctricas, construcciones e industrias, así como eliminar el uso de carbón e invertir en energías renovables en lugar de energías fósiles.
“Si tomamos estas medidas, podemos salvar hasta 150 millones de vidas en este siglo XXI y ayudar a limpiar nuestra atmósfera”, señaló el secretario general de la ONU en su mensaje.
