La mañana de este lunes se oficializó el divorcio de Bill Gates y su exesposa, Melinda Ann French. La corte del condado de King, en el estado de Washington, aprobó la separación de la pareja que estuvo casada durante 27 años.
Melinda Gates hizo la petición del divorcio el pasado mes de mayo ante el tribunal, dijo que la relación con su marido estaba ”irremediablemente rota”, en el trámite legal de este lunes dijo que no cambiaría su nombre y no ofrecería manutención conyugal.
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Sobre la división de bienes el acuerdo se llevó a cabo por separado, este no se incluyó en el decreto de disolución de este lunes. Los empresarios anunciaron por primera vez que se divorciarían en mayo, sosteniendo que ya no veían la posibilidad de poder continuar como pareja en la siguiente etapa de sus vidas.
”Después de pensar y trabajar mucho en nuestra relación, hemos decidido poner fin a nuestro matrimonio”, dijeron a través de un comunicado. ”Durante los últimos 27 años, hemos criado a tres hijos increíbles y construido una base que funciona en todo el mundo para permitir que todas las personas lleven una vida saludable y productiva”, agregaron.
Luego de anunciar su ruptura, se generaron ciertas dudas sobre si se verían afectados los negocios y las actividades caritativas que han llevado durante su relación. Bill Gates actualmente posee 1.3 por ciento de Microsoft, compañía que fundó en 1975. Dejó de desempeñarse como director ejecutivo desde el 2000 y no forma parte de la junta desde el año pasado.
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En cuanto la Fundación Bill y Melinda Gates (fundación privada más grande del mundo), acordaron seguir dirigiéndola cada quien por su lado. Los activos de la fundación se valoran en casi 50 mil millones de dólares.
En cuanto a sus respectivos roles dentro de la fundación, anunciaron que si después de dos años deciden no continuar, French Gates dejará sus cargos de copresidenta y fideicomisaria. Por su parte Gates tendría que comprar su parte para que ella reciba recursos provenientes de él y así seguir con su trabajo filantrópico.
