El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo este jueves que tanto su país como México comparten el interés por reducir la migración irregular luego de mantener una llamada con el canciller Marcelo Ebrard. La llamada ocurre horas después de que la administración de Joe Biden presentara su plan abordar la crisis migratoria que enfrenta.
“El secretario Blinken y el canciller Ebrard discutieron los esfuerzos coordinados entre Estados Unidos y México para abordar las causas fundamentales de la migración irregular y promover una migración justa, ordenada y humana en la región. Estados Unidos y México comparten un interés en soluciones sostenibles para reducir la migración irregular en, desde y a través de la región y para promover la seguridad económica y la prosperidad de nuestra región”, dijo Ned Price, vocero del Departamento de Estado en un comunicado.
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En la llamada, Blinken y Ebrard hablaron sobre los esfuerzos coordinados en materia de migración así como las acciones para promover la democracia y los derechos humanos en la región.
Horas antes, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, dijo que los esfuerzos para abordar las causas fundamentales de la migración desde tres países centroamericanos no producirán resultados inmediatos, ya que dio a conocer una estrategia amplia que evita metas y plazos detallados.
Harris dijo que Estados Unidos por sí solo no puede abordar los motivos profundamente arraigados para que la gente abandone Guatemala, Honduras y El Salvador, incluida la corrupción, la violencia y la pobreza. Los gobiernos de México, Japón y Corea del Sur, junto con Naciones Unidas, se han comprometido a sumarse al impulso.
La Casa Blanca dijo en un comunicado que las acciones de la administración Biden “se apoyan en la convicción del gobierno de los Estados Unidos de que todas las personas deben poder encontrar seguridad y tener una vida estable y digna en sus propios países. Cuando esto no es así, deben existir el asilo y otras vías de migración legal para aquellos que lo necesiten”.
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Por lo que Estados Unidos tiene “claros intereses de seguridad nacional, económicos y humanitarios, en promover una migración segura, ordenada y humana”. Por ello, el gobierno de EU buscará “incrementar el apoyo humanitario, las protecciones regionales y la inversión en la gestión de la migración, los Estados Unidos contribuirá a que haya más estabilidad en la región, a fortalecer las vías legales para aquellos que deben emigrar y a reducir la migración irregular”.
El gobierno estadounidense informó que los ejes de trabajo de su estrategia sobre migración incluyen: estabilizar a las poblaciones con necesidades acuciantes, ampliar el acceso a la protección internacional y en sus países de origen. Mejorar y ampliar los programas de trabajo temporal en la región con garantías para los trabajadores y ayudar a reintegrar a las personas retornadas.
En cuanto a la seguridad, buscarán una gestión segura y humana de las fronteras, así como reforzar los mensajes públicos regionales sobre migración y asegurar un mayor acceso a vías lícitas para la protección y las oportunidades en Estados Unidos.
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El pasado 16 de julio, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) reportó que en junio 188 mil 829 personas intentaron ingresar a lo largo de la frontera con México, cifra que representa un aumento del 5% con respecto a mayo de este mismo año.
Se trata del cuarto mes consecutivo que se registran más de 170 mil detenciones. Las detenciones de migrantes en la frontera entre los Estados Unidos y México habían alcanzado un máximo histórico en mayo con más de 180 mil 34 arrestos de migrantes, lo que representaba un aumento de cerca del 1% respecto a los 178 mil 622 de abril, que a su vez fueron un 3% superior a los 173 mil 348 de marzo, dos meses que en su momento ya marcaron máximos históricos.
