AP y EFE.- El incremento de casos de COVID-19 en Tokio alcanzó su punto más alto en dos meses, lo cual prácticamente garantiza que el gobierno de Japón declarará un nuevo estado de emergencia a partir de la próxima semana y que permanecerá vigente durante los Juegos Olímpicos de Tokio.
El presidente del COI Thomas Bach tiene previsto llegar a Tokio el jueves y cumplirá una cuarentena de tres días en el hotel cinco estrellas del Comité Olímpico Internacional en la capital.
Un nuevo estado de emergencia impediría que incluso los propios japoneses puedan acudir a las competencias. La decisión sobre si se permiten o no espectadores se tomaría el viernes, cuando los organizadores locales se reúnan con el COI y otras entidades.
El cuasi estado de emergencia que rige actualmente debería culminar el domingo.
AUMENTO DE CASOS
Tokio contabilizó este miércoles 920 nuevos casos de covid-19, la mayor cifra diaria desde mediados de mayo y cuando restan 16 días para la inauguración de los Juegos Olímpicos.
Se trata de la cifra más elevada desde el 13 de mayo, cuando Tokio registró 1,010 contagios, en pleno estado de emergencia.
El promedio de casos diarios durante la última semana en Tokio ha superado el peor nivel en la escala de cuatro grados establecida por el Gobierno de Japón para valorar la gravedad de la propagación del virus, según las autoridades locales.
El repunte de casos en días recientes, tanto en Tokio como en otras zonas del país, ha llevado al Ejecutivo a valorar el mantenimiento durante más tiempo del estado de emergencia y sus restricciones que afectan al área capitalina y otras de las ciudades niponas más pobladas, que estaba inicialmente previsto que se levantaran el próximo lunes, lo que en caso de ocurrir seguirá vigente durante los Juegos.
RESTRICCIONES
La extensión de la vigencia de estas medidas supondría que seguirán en pie durante la celebración de los Juegos Olímpicos.
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Las restricciones afectan principalmente al horario comercial, la venta de bebidas alcohólicas y el aforo en eventos, pero no a los desplazamientos de la población, que nunca ha experimentado en Japón un confinamiento a raíz de la pandemia.
Se espera que el primer ministro japonés, Yoshihide Suga, formalice una decisión al respecto mañana, jueves.
La propagación de la enfermedad, que los expertos atribuyen a la expansión de variantes más contagiosas como la alfa o la delta, ha alimentado el escepticismo sobre la celebración de los Juegos de Tokio 2020 con la presencia de público, por el temor a que se conviertan en un foco de infección u origen de nuevas cepas.
REDUCCIÓN DE AFOROS
Los organizadores del evento nunca han descartado la celebración de competiciones a puerta cerrada en función de la situación epidémica; sin embargo, recientemente anunciaron que tenían previsto permitir la entrada de hasta 10,000 espectadores o la mitad del aforo de las instalaciones.
Las autoridades estarían planteándose ahora reducir la cifra hasta 5,000. Tambien celebrarán a puerta cerrada las pruebas que empiecen después de las 21 horas; incluidas las ceremonias de apertura y clausura, según filtraciones a la agencia de noticias local Kyodo.
Se espera que los organizadores celebren esta misma semana una reunión para debatir al respecto.
