Por: Ana Lucía Hernández
El fracaso de la compra de medicamentos a través de la Oficina de Naciones Unidas de Servicios para Proyectos, UNOPS, no se limita a que el organismo concretó sólo cuatro de cada 10 piezas solicitadas, como le informamos en LatinUs. Un reporte del Instituto Farmaceutico, Inefam, revela que la medicina que más compró el gobierno de López Obrador a través del organismo internacional es paracetamol en tableta de 500mg: 80 millones de piezas por un máximo total de 138 millones de pesos.
“El paracetamol es el medicamento que más se receta en el sector público, pero faltan muchísimos productos requeridos de manera inmediata, para la diabetes y el cáncer, por ejemplo”, asegura Enrique Martínez, director del Inefam.
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De acuerdo con el análisis del Instituto, en segundo y tercer lugar están metoprolol y losartán, medicamentos utilizados para controlar la presión arterial. Le siguen electrolitos orales, diuréticos, antiinflamatorios, paracetamol en solución oral, antiespasmódicos, analgésicos, crema para infecciones de la piel, jarabe expectorante, agua inyectable y un antibiótico.
En lo que el Inefam llama “Top 20 de claves adjudicadas con mayor número de piezas para la compra de UNOPS”, no se incluye un sólo tratamiento de quimioterapia ni para adultos ni para niños. Tampoco anestesia.
De acuerdo con el estudio, más de la mitad de las claves convocadas por la UNOPS quedaron desiertas, incluidas las de algunos medicamentos oncológicos, de oftalmología, psiquiatría y anestesia. La razón principal: precio no aceptable.
“Dijo el secretario Alcocer que eran 730 claves adjudicadas y resulta que ahora solamente son 530. Nos parece que, como en cualquier mañanera, volvieron a mentir (…) Ha sido un proceso lento, con muchos atrasos y resulta que menos del 45 por ciento de las claves fueron adjudicadas. Es un fracaso. Sin duda cientos de miles de pacientes se verán afectados”, asegura Enrique Martínez, en entrevista con LatinUs.
El reporte del Instituto señala que en 14 de 21 grupos terapéuticos no se adjudicó ni la mitad de las claves requeridas. Los grupos con mayor desabasto son: intoxicaciones, oftalmología, anestesia, enfermedades infecciosas, psiquiatría, analgesia, enfermedades inmunoalergicas, hematología y oncología.
“Lo que nos sorprende es que más del 80% de las claves desiertas pudieron haber sido cubiertas por alguna empresa establecida en el país y no sólo me refiero a empresas de capital mexicano sino de empresas trasnacionales que están aquí y que pueden producir y pueden ofertar”, afirma el director del Inefam.
Para subsanar el fracaso de la compra de medicamentos vía UNOPS, el Instituto de Salud para el Bienestar, Insabi, lanzó una convocatoria para cotizar 628 de las 653 claves que el organismo internacional no adjudicó. “Salió la convocatoria el 10 de junio, el 11 fue la fecha límite para que las empresas interesadas presentaran una cotización de 628 claves convocadas por parte de Insabi, no sabemos cómo será ese proceso”, agrega.
De acuerdo con la proyección del Instituto, de los casi 70 mil millones de pesos que el gobierno federal invertiría en la compra de medicamentos vía UNOPS, quedarán sin utilizar más de 37 mil millones y medio. Lo anterior de ninguna manera significa un ahorro, significa que todo ese dinero no se traducirá en medicinas.
“Los ahorros que ellos presumen no tienen ningún sentido porque hasta el momento no hay una compra asegurada, lo que persisten son las prisas, las compras de emergencia con adjudicaciones directas y desabasto”, asegura el director del Inefam.
Y concluye: “debo ser claro, los importes y las piezas que están en el informe van en función de lo que sabemos desde la convocatoria hasta la apertura de las ofertas del 5 de febrero, estamos hablando de cantidades máximas posibles y no conocemos los descuentos que se hayan obtenido, por lo tanto, los importes que estamos sugiriendo ahí son los máximos posibles”.
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