Sha’Carri Richardson, estadounidense que corre los 100m, da positivo a cannabis y quedaría fuera de Tokio 2020

Sha'Carri Richardson, tras ganar una carrera. (Foto: Reuters).
• Sha’Carri Richardson, atleta estadounidense favorita para pelear por la medalla de oro en 100 metros en Juegos Olímpicos, puede quedar fuera por consumo de marihuana.

Reuters.- La velocista estadounidense Sha’Carri Richardson, quien es apuesta de medalla de oro en los 100 metros planos en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, dio positivo por cannabis, según reportaron algunas fuentes, con lo que su participación en la justa veraniega está en serio riesgo.

De acuerdo con el periódico Cincinnati Enquirer, el positivo de Richardson se presentó en las pruebas olímpicas de Estados Unidos en junio, en las cuales la corredora se reafirmó como favorita para llevarse la prueba de 100 metros planos al registrar 10.86 segundos.

Una prueba positiva durante las competencias significaría que todos los resultados de Richardson serían anulados, incluida su victoria en los 100 metros.

Otra fuente dijo que Jenna Prandini, quien terminó en cuarto lugar en la final, ya había sido contactada para representar a Estados Unidos en la prueba de 100 metros en Tokio.

Se hicieron llamadas y enviaron e-mails al agente de Richardson, Renaldo Nehemiah, a la Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA) y al U.S.A Track and Field (USATF), pero sin obtener respuesta.

En un tuit, de forma escueta, Richardson escribió: Soy humana.

La deportista de 21 años aparecerá este viernes en el programa Today Show de NBC, confirmó la cadena.

Sha’Carri Richardson estaba considerada para correr este fin de semana los 200 metros en la etapa de la Diamond League en Estocolmo, Suecia, pero hasta la noche del jueves no aparecía su registro en el sitio oficial del evento.

La cannabis está prohibida por la WADA, pero si los deportistas que dan positivo pueden demostrar que su ingestión no estuvo relacionada con el desempeño atlético, se impone una suspensión de tres meses y no la regular de cuatro años.

Si un deportista está dispuesto a seguir un programa de tratamiento aprobado en colaboración con su organismo nacional antidopaje, la sanción puede reducirse a un mes.

Así las cosas, en el mejor de los escenarios, Richardson enfrentaría una sanción de 30 días, por lo que no sería reconocida la marca de 10.86 segundos del selectivo en Oregon, que la hizo merecedora del boleto a Juegos Olímpicos y se perdería la prueba en Tokio, aunque el equipo de Estados Unidos podría incluirla en el relevo de 4×100 que se corre después del hipotético castigo antes mencionado.

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