Florencia Serranía Soto deja a partir de este lunes la dirección del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro a casi dos meses del colapso de un tramo elevado de la Línea 12, hecho que dejó un saldo de 26 muertos y más de 80 heridos, y en medio de una oleada de críticas a su gestión en la dependencia.
Su puesto será ocupado por Guillermo Calderón, quien hasta ahora fungía como director General del Servicio de Transportes Eléctricos de la Ciudad de México, informó la jefa de gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum.
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En una conferencia en la que no se permitió sesión de preguntas por parte de la prensa, Sheinbaum anunció la salida de Florencia Serranía, quien estaba al frente del Metro de la Ciudad de México desde diciembre de 2018.
Calderón ha sido coordinador de proyectos en el Instituto Mexicano del Petróleo, responsable del diagnóstico ambiental de la Región Sur de Pemex y consultor en transferencia de tecnología del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
Además, fue director General de Regulación y Vigilancia Ambiental en la Secretaría del Medio Ambiente de la ciudad y, hasta el 4 de diciembre de 2018, director General de Metrobús de la Ciudad de México.
Luego del colapso de la Línea 12 la noche del pasado 3 de mayo, Serranía evitó asumir la responsabilidad por el suceso, así como dirigir la atención a las víctimas. Desde entonces, su renuncia o el posible despido de su cargo quedó en vilo, ya que autoridades de los gobiernos local y federal evitaron señalar a algún responsable.
La suerte de las familias de las víctimas mortales y de las decenas de heridos quedó también en desatención por parte de Serranía, pues en aquel entonces se limitó a indicar que existe un grupo del gobierno encargado específicamente de atender esa situación. Además, no dio a conocer cómo se hará efectivo el seguro del Metro y la cantidad de dinero que será entregada a los afectados.
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“Daremos trámite de los requerimientos”, dijo.
Desde el derrumbe de la Línea Dorada, las participaciones de Serranía Soto en los asuntos relacionados con el caso han sido prácticamente nulas. Tan sólo el pasado miércoles 16 de junio, durante la presentación del peritaje preliminar sobre el desplome de la Línea 12 del Metro, la hoy exdirectora de este sistema de transporte fue una de las principales ausentes pese a la relevancia del acto.
Actualmente la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y la directora del Metro enfrentan una denuncia ante la Fiscalía General de la República por los delitos de corrupción y delincuencia organizada, la cual fue presentada por la madre del niño Brandon Giovanni quien murió tras la caída de un tren del Metro por el desplome de un tramo de la estructura elevada entre las estaciones de Olivos y Tezonco.
Según confirmó la señora Tapia, la denuncia también va contra a los exjefes de gobierno capitalinos, Marcelo Ebrard (en cuya gestión se inauguró la Línea 12) y Miguel Ángel Mancera.
También el Sindicato Mexicano de Trabajadores del Metro anunció el 6 de mayo que presentaría una denuncia penal por homicidio culposo contra Florencia Serranía por el colapso, así como por los delitos de lesiones culposas, corrupción y los que resultaran.
La ingeniera retomó la dirigencia del STC Metro en 2018, luego de que estuvo al frente de la institución entre 2004 y 2006. Su retorno como la principal funcionaria del servicio público capitalino lo hizo por invitación de Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, de quien era vecina.
“Conocí a Claudia Sheinbaum, era mi compañera de edificio. Las dos acabábamos de regresar y éramos las jóvenes recién doctoradas, siempre me cautivó su inteligencia. Al cabo del tiempo nos hicimos amigas”, escribió Serranía en la página web del Instituto de Ingeniería de la UNAM.
Los negocios de Serranía
En el año 2017, Florencia Serranía Soto ofreció los servicios de su empresa Urban Travel Logistics (UTL) al Metro; sin embargo, la dirección de aquel entonces rechazó la propuesta al argumentar incumplimiento de condiciones legales, financieras, técnicas y económicas, según demostró una investigación realizada por Latinus.
UTL perdió la licitación de estudios de pre-inversión por incumplir condiciones legales, financieras, técnicas y dar la propuesta económica más alta por sus servicios: 77.8 millones de pesos. Entre las inconsistencias, el Metro detectó que la empresa propuso perfiles de profesionistas que no cubrían los requisitos solicitados.
De acuerdo con los registros públicos, Urban Travel Logistics no consiguió ser proveedora del Metro, pero sí tuvo contratos con el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto.
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Entre ellos se encuentran uno que le adjudicó la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) en 2018, ocho meses antes de que Serranía fuera nombrada nuevamente titular del Metro. Fue por 3 millones de pesos para la integración de expedientes para llevar a cabo las escrituras a favor del Gobierno Federal de predios de propiedad privada afectados por el derecho de vía del Paso Express.
Uno más fue por la cantidad de 3.9 millones de pesos para el estudio y proyecto ejecutivo de la estación de retorno del Mexibus Lechería y otro por 7.6 millones para la escrituración de predios en un tramo del Libramiento Villahermosa, en Tabasco.
