Tras acusaciones por abuso sexual, Armie Hammer ingresó a un programa de rehabilitación

Tras acusaciones por abuso sexual, Armie Hammer ingresó a un programa de rehabilitación
Elizabeth Chambers, exesposa del actor, fue quien llevó a Armie Hammer al aeropuerto con destino a Florida. Foto: Shutterstock

Luego de meses de acusaciones de violaciones y abuso sexual contra Armie Hammer, el actor decidió ingresar a un centro de rehabilitación para tratar sus adicciones al alcohol, drogas y sexo.

El portal de la revista Vanity Fair informó que Armie Hammer abandonó las Islas Caimán, donde estaba desde principios de mayo, para ingresar a una clínica en Florida desde el pasado 31 de mayo.

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La revista detalla que fue Elizabeth Chambers, exesposa del actor, quien lo llevó al aeropuerto, ya que el protagonista de Call me by your name le pidió apoyo para rehabilitarse.

Dos fuentes confirmaron a la revista que Hammer se registró dentro de la clínica el pasado lunes 31 de mayo, en donde ha estado por más de una semana.

“Todo el mundo mira a Armie pensando que ha tenido una vida privilegiada, y que eso debe significar que no hubo problemas en su juventud y que todo fue perfecto. Pero esa no es necesariamente la forma en que van las cosas”, dijo un amigo del actor. 

Desde enero pasado Hammer ha sido señalado de actitudes sexuales violentas. A través de una cuenta de Instagram anónima llamada House of Effie, se filtraron supuestos mensajes privados en los que detalla fantasías sexuales, como mutilaciones y canibalismo.

Después se dieron a conocer testimonios de dos exparejas sobre las actitudes dañinas del actor. En Los Ángeles una investigación fue abierta contra el actor estadounidense tras la presentación de una denuncia de violación.

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El actor ha declarado que sus actividades sexuales fuera de su matrimonio fueron “completamente consensuadas en el sentido en que fueron totalmente habladas, acordadas y mutuamente participatorias”.

Elizabeth Chambers le pidió el divorcio el verano pasado después de diez años juntos y dos hijos: Harper, de seis años, y Ford, de cuatro.

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