Navalny, en huelga de hambre, acusa que lo han intentado alimentar a la fuerza

navalny-huelga-de-hambre-describe-amenazas-alimentarlo-fuerza
Foto: AP

AP.- El líder opositor ruso encarcelado Alexei Navalny, quien ha estado en huelga de hambre desde el 31 de marzo, describió las amenazas de ser alimentado a la fuerza, usando camisa de fuerza y ​​”otros placeres” para hacerlo.

En una publicación de Instagram, Navalny dijo este viernes que un funcionario le dijo que un análisis de sangre indicaba que su salud se estaba deteriorando y lo amenazó con alimentarlo a la fuerza si continuaba negándose a comer.

Te recomendamos leer: Hong Kong sentencia a prisión a activistas prodemocracia

“Y luego me detalló los placeres de la alimentación forzada. Camisa de fuerza y ​​otros placeres”, dijo el político disidente del gobierno ruso, y agregó que instó a los funcionarios a no hacerlo, “señalando una cláusula en la ley”.

Navalny, el crítico más reconocido del presidente Vladimir Putin, exige una visita de su médico después de desarrollar un severo dolor de espalda y entumecimiento en las piernas mientras está en prisión.

El líder opositor denunció que los funcionarios penitenciarios se negaron a dejar entrar a su médico porque “temen que suceda que la pérdida de sensibilidad en las extremidades pueda estar relacionada con el envenenamiento”, y reiteró que tenía “un derecho absolutamente garantizado: ser examinado por un médico civil independiente”.

Entérate: Irán comienza a enriquecer uranio al 60%, su máximo nivel

Al describir su estado después de más de dos semanas de huelga de hambre, Navalny dijo que su cabeza “daba muchas vueltas”, pero que “todavía caminaba”.

La esposa de Alexei Navalny, Yulia, quien lo visitó en prisión a principios de esta semana, dijo que el político estaba “alegre” pero que tenía problemas para hablar y perdió mucho peso.

El líder de la oposición rusa, de 44 años, fue arrestado en enero a su regreso de Alemania, donde había pasado cinco meses recuperándose de un envenenamiento por un agente que culpa al Kremlin, acusaciones que los funcionarios rusos han rechazado. 

El arresto de Navalny desencadenó una ola masiva de protestas en toda Rusia, la mayor muestra de desafío al gobierno en los últimos años.

No te pierdas: Contagio de Covid-19 no garantiza inmunidad contra reinfección en jóvenes, señala estudio

Poco después del arresto, un tribunal ordenó a Navalny que cumpliera dos años y medio de prisión por una condena por malversación de fondos de 2014 que, según él, fue inventada y que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos consideró “arbitraria y manifiestamente irrazonable”.

El mes pasado, el político fue trasladado a un penal al este de Moscú, capital del país, el cual es conocido por sus duras condiciones para los reos.

Tras su ingreso, Navalny se ha quejado de dolor de espalda y dijo que estaba perdiendo sensibilidad en las piernas. Sus demandas de una visita médica fueron rechazadas por los funcionarios de la prisión. 

El servicio penitenciario estatal de Rusia dijo que estaba recibiendo toda la ayuda médica que necesitaba. En respuesta, Navalny se declaró en huelga de hambre.

Comparte esta nota