La Conferencia Episcopal Mexicana (CEM) “se deslindó” de cualquier acto político realizado por el obispo emérito de Ecatepec, Estado de México, Onésimo Cepeda Silva, quien oficializó su registro como aspirante a candidato a diputado plurinominal por el partido Fuerza por México.
A través de un comunicado de prensa, difundido este lunes, la CEM aclaró que de acuerdo con el Canon 287, con los cuales se rigen, los clérigos no pueden participar activamente en los partidos políticos ni en la dirección de asociaciones sindicales, a no ser que, según el juicio de la autoridad eclesiástica competente, lo exijan la defensa de los derechos de la Iglesia o la promoción del bien común.
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Asimismo, las leyes mexicanas establecen que ningún ministro de culto religioso puede participar por un cargo de elección popular, si no tiene cinco años de haber solicitado su retiro como clérigo.
En este caso, en la CEM no se puede constatar que Onésimo Cepeda “haya pedido ni recibido el permiso prescrito por las leyes canónicas”, lo cual le daría el permiso legal para ocupar una candidatura a un cargo de elección popular como se la otorgó el partido Fuerza por México.
Como obispo emérito de la Diócesis de Ecatepec, sin oficio eclesiástico actual, y como tal, está sujeto al Derecho Canónico vigente.
De acuerdo con la conferencia episcopal, el obispo emérito de Ecatepec, como cualquier ciudadano, está sujeto a las leyes mexicanas y corresponderá a las instituciones del Estado dar o no la validez y aprobación a su candidatura.
Por lo tanto, la CEM “se deslinda” de todo acto político que a título personal realice Onésimo Cepeda, “no ejerciendo por ello, ni de voz ni de acción, representatividad oficial de la Iglesia Católica”.
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La CEM, aclaró la misiva, “no pretende afectar los derechos de nuestro hermano obispo, sólo establecer con claridad lo señalado por el Derecho Civil y el Eclesiástico”.
