El club Mar-a-Lago del expresidente Donald Trump, que fue parcialmente cerrado debido a un brote de coronavirus, reabrirá el próximo sábado, de acuerdo con un correo enviado a los socios el jueves.
Trump se mudó a Mar-a-Lago después de dejar Washinton en enero pasado, y desde entonces ha estado jugando golf, comiendo con amigos, y recibiendo a líderes del Partido Republicano.
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El viernes pasado, el club anunció el cierre diciendo en un correo a que “algunos integrantes del personal recientemente dieron positivo a coronavirus”, por lo que dejó de servir almuerzos.
La Organización Trump se negó a decir cuántos trabajadores contrajeron el virus en el club en Palm Beach, Florida, y únicamente señaló que algunos empleados fueron puestos en cuarentena “por precaución”.
Pero en un nuevo correo obtenido por The Washington Post, el club agradeció la paciencia de los socios y enfatizó que “espera darles la bienvenida a todos”. El club servirá almuerzos a partir del sábado, y cenas desde el miércoles, de acuerdo con el diario.
Trump fue visto entreteniendo a invitados en Mar-a-Lago el martes pasado y, pese al cierre, no traía un cubrebocas. El expresidente fue fotografiado por el Daily Mail mientras hablaba con varias personas en un balcón del resort.
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Las cámaras también lo captaron con el representante Madison Cawthorn de Carolina del Norte el domingo. Cawthorn, un republicano, publicó videos y fotos del encuentro con el exmandatario estadounidense. Ninguno de los dos utilizó una mascarilla.
El brote de coronavirus que llevó al cierre parical de Mar-a-Lago, reportó el Daily Beast el pasado 20 de marzo, llegó después de que varios grupos realizaran fiestas en el club ignorado el uso de cubrebocas y la práctica del distanciamiento físico.
Cuando Trump era presidente de Estados Unidos, la Casa Blanca registró varios brotes por resistirse a cumplir las medidas de precaución. El expresidente, que constantemente minimizó el riesgo que representaba la pandemia, fue hospitalizado con coronavirus en octubre del año pasado.
