EFE.- Los ataques y el aumento de la violencia este mes en Yemen se ha cobrado la vida de al menos ocho niños, mientras que otros 33 han resultado heridos por la escalada del conflicto en este país devastado por una cruenta guerra que dio comienzo en 2014, denunció hoy el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
“Una creciente ola de violencia en Yemen sigue cobrando un precio devastador en los niños, con ocho menores confirmados muertos y 33 más heridos en una serie de ataques desde principios de mes”, dijo en un comunicado el representante de UNICEF en el Yemen, Philippe Duamelle.
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La organización pudo verificar estos incidentes en un momento en el que el conflicto se está intensificando en las líneas del frente, especialmente en la provincia suroccidental de Taiz y en la ciudad portuaria de Hudeida, donde se han recrudecido los combates entre los rebeldes hutíes y las tropas del Gobierno reconocido internacionalmente.
Sin embargo, Duamelle apuntó que la cifra de niños muertos puede ser “aun mayor”.
“Condenamos estos ataques en los términos más enérgicos posibles. Con demasiada frecuencia, los niños y sus familias pagan el precio más alto cuando el conflicto se desata a su alrededor”, dijo el representante de la agencia de Naciones Unidas.
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La semana pasada, al menos tres niños de entre 6 y 12 años murieron por el impacto de un misil contra una escuela que había sido ocupada por las tropas gubernamentales en la provincia de Taiz, donde los hutíes llevan a cabo una ofensiva para hacerse con el control de la zona.
Asimismo, a principios de marzo la ONG Save the Children dijo que en las últimas semanas la violencia en Yemen ha dejado un total de 20 menores muertos o heridos.
La guerra en Yemen estalló en 2014 y en marzo de 2015 se convirtió en un conflicto regional con la intervención de una coalición militar capitaneada por Arabia Saudí contra los rebeldes hutíes y en apoyo del Gobierno reconocido internacionalmente.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el conflicto ha provocado la catástrofe humanitaria más grande del planeta y más del 80% de la población yemení requiere algún tipo de ayuda.
