La fiscal general de Justicia de la Ciudad de México, Ernestina Godoy, dijo este viernes que se deberá determinar una nueva resolución, con perspectiva de género, en el caso del feminicidio de Abril Pérez en 2019.
“En compañía de la familia (de Abril), hemos presentado una serie de recursos de revisión judicial buscando revocar la decisión de los jueces para que el caso sea clasificado nuevamente como tentativa de feminicidio”, dijo Godoy en un video compartido en redes sociales.
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“El día de ayer, un tribunal colegiado de amparo en materia penal analizó la acusación de la fiscalía y determinó que debe dictarse una nueva resolución, pero con perspectiva de género, como los solicitamos desde el principio”, agregó.
La fiscal precisó que esta determinación “confirma que los jueces que inicialmente intervinieron en el caso de Abril no analizaron correctamente los datos de prueba presentados”.
Recordó que en 2019 la fiscalía recibió una denuncia en la que Abril denunciaba haber sido víctima de “agresiones extremadamente violentas” por parte de su esposo. Se realizó una investigación y se llevó la acusación ante un juez de control por tentativa de feminicidio de parte de su cónyuge.
No obstante, dijo Godoy, la acusación fue reclasificada como violencia familiar y lesiones dolosas lo que permitió que el presunto agresor quedara en libertad, al tratarse de delitos que no ameritan prisión preventiva oficiosa.
El caso de Abril Pérez
En enero de 2019, Juan Carlos “N” atacó a Abril golpeándola en el rostro con un bate de béisbol mientras ella dormía, después la llevó a un vestidor, la hirió con un bisturí y trató de asfixiarla. Uno de los tres hijos de la pareja, un adolescente de 15 años, escuchó los gritos y detuvo a su padre.
Después de eso, Abril estuvo hospitalizada durante una semana. Mientras el proceso penal contra Juan Carlos avanzaba, la víctima se mudó a Monterrey -de donde era originaria- y consiguió el divorcio.
La familia de Abril describió a Juan Carlos como un hombre violento y celoso, que había contratado a investigadores privados para que la siguieran porque temía una infidelidad.
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En septiembre de 2019, Juan Carlos fue acusado de feminicidio en grado de tentativa. Pero cinco días después, el juez Federico Mosco González reclasificó el delito a lesiones y violencia familiar, un delito no grave que permite solicitar fianza.
Al poco tiempo, el magistrado Héctor Jiménez determinó retirar la prisión preventiva que se había dictado como medida cautelar contra Juan Carlos. Y finalmente, el juez Carlos Trujillo ordenó su libertad el 8 de noviembre de 2019. Abril ya había mandado una carta a los jueces diciendo que temía por su vida.
El 25 de noviembre de 2019, dos hombres a bordo de una moto le dispararon a Abril en la cabeza y cuello. El ataque ocurrió justo cuando Abril salía de unos exámenes psicológicos realizados a sus hijos y solicitados por su exmarido, quien peleaba la custodia de los menores.
Ella iba a bordo de un auto, en el asiento del copiloto, cuando le dispararon. Horas después murió en el hospital.
Desde el inicio, la familia de Abril aseguró que Juan Carlos contrató a los dos autores materiales y que posiblemente ya estaba fuera del país.
