AP.- Bennie Thompson, un congresista demócrata, demandó este martes al expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, por incitar a la insurrección en el Capitolio y por conspirar junto con su abogado, Rudy Giuliani, y grupos extremistas para tratar de evitar que el Senado certificara el triunfo electoral de Joe Biden.
La demanda de Thompson, representante por el estado de Mississippi y presidente del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, es parte de una ola esperada de litigios sobre los disturbios del 6 de enero. A esta demanda se unió la Asociación Nacional para el Progreso de las Personas de Color (NAACP, por sus siglas en inglés).
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En la demanda se acusa a Rudy Giuliani, abogado personal del expresidente Trump, y a grupos como Proud Boys y Oath Keepers, organizaciones extremistas que tenían integrantes acusados de participar en el asedio al Capitolio.
La demanda rastrea el extenso esfuerzo de Trump y Giuliani para poner en duda los resultados de las elecciones a pesar de que los tribunales de todo el país y los funcionarios electorales estatales rechazaron sus infundadas acusaciones de fraude.
A pesar de la evidencia, señala la demanda, los hombres describieron las elecciones como robadas mientras Trump “respaldó más que desalentó” las amenazas de violencia de sus partidarios enojados en las semanas anteriores al asalto al Capitolio.
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“La serie de eventos cuidadosamente orquestados que se desarrollaron en el mitin de Save America (Salvemos a Estados Unidos, en español) y el asalto al Capitolio no fue un accidente o una coincidencia”, dice la demanda contra Trump.
“Fue la culminación prevista y previsible de una campaña cuidadosamente coordinada para interferir con el proceso legal requerido para confirmar el recuento de votos emitidos en el Colegio Electoral”, se lee en el documento.
Esta demanda, presentada en un tribunal federal en Washington bajo una ley conocida como Ley Ku Klux Klan (KKK), se presentó tres días después de que Trump fuera absuelto del segundo juicio político en su contra.
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Dicha ley se aprobó en 1871 en respuesta a la violencia del KKK y prohíbe la violencia o la intimidación destinadas a impedir que el Congreso u otros funcionarios federales realicen sus deberes constitucionales.
Los abogados de Trump han negado que este incitó a los disturbios el pasado 6 de enero. Un asesor del expresidente no hizo comentarios sobre la demanda del congresista; tampoco lo hizo un abogado de Rudy Giuliani.
Históricamente, los presidentes gozan de inmunidad frente a demandas en su contra, pero la demanda presentada este martes contra Trump fue a título personal, no oficial, y alega que ninguno de los comportamientos en cuestión tuvo que ver con sus responsabilidades como presidente.
