La administración de Joe Biden está impulsando la distribución y compra de vacunas contra el coronavirus para poder proteger a 300 millones de estadounidenses para fines de verano, aumentando las entregas a los estados luego de las quejas por la escasez y los envíos inconsistentes.
El presidente Biden anunció el aumento en las entregas a los estados en una rueda de prensa el martes por la tarde, junto con la noticia de que el gobierno federal está comprando 100 millones de dosis adicionales de cada una de las dos vacunas contra el coronavirus aprobadas en Estados Unidos, para un total de 200 millones de nuevas dosis.
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Con las compras existentes, la Casa Blanca espera que los estados puedan administrar los regímenes de dos dosis necesarios para, junto con las dosis que ya se tenían, vacunar a 300 millones de personas.
“Esto es suficiente para vacunar a 300 millones de estadounidenses para fines de verano, principios de otoño”, dijo Biden, calificando las medidas para aumentar la oferta como un “esfuerzo en tiempos de guerra”.
El incremento de aproximadamente un 16% en las entregas a los estados llegó en medio de quejas de una escasez tan grave que algunos centros de vacunación en el país tuvieron que cancelar decenas de miles de citas con personas que buscaban la primera inyección.
“Puedo anunciar que aumentaremos las distribuciones semanales de vacunas a los estados, tribus y territorios de 8.6 millones dosis a un mínimo de 10 millones de dosis”, afirmó el presidente. “Esto permitirá que millones de estadounidenses más reciban la vacuna antes de lo previsto”.
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Biden también prometió que le proporcionará un “pronóstico confiable” a los estados para que puedan consultar cuántas dosis recibirán en los próximos 21 días, asegurando que esta medida ayudará a que las autoridades locales “tengan una mayor certeza” a la hora de planear campañas de vacunación.
“Hasta ahora, hemos tenido que adivinar cuántas vacunas esperar”, dijo Biden. “Esto es inaceptable, aquí hay vidas en juego”.
Con información de AP.
