El clavadista mexicano Rommel Pacheco Marrufo, triple campeón de los Juegos Panamericanos, se registró este martes en Mérida, Yucatán, como precandidato federal del III Distrito del Partido Acción Nacional (PAN) para los comicios de mediados de año, en los que buscará una diputación.
La decisión de Pacheco de aceptar la precandidatura a una diputación federal en Yucatán supone un eventual fin a su carrera deportiva, a poco más de seis meses de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 para los que se ha preparado desde el 2016.
Pacheco informó que recibió una invitación del gobernador panista, Mauricio Vila, para sumarse a las campañas y este martes se presentó en la sede de ese partido en Mérida, su ciudad natal, 1,700 kilómetros al sureste de la Ciudad de México, y recibió la documentación correspondiente.
Rommel Pacheco, campeón de la Copa del Mundo de 2016, recibió la constancia que lo acredita como precandidato a la diputación federal de Mértida, Yucatán, de manos del líder estatal del PAN, Asís Cano.
MEDALLISTA
Después de ganar la medalla de oro en plataforma en los Panamericanos de Santo Domingo 2003, Rommel fue medallista de plata en esa prueba en Río de Janeiro 2007 y Guadalajara 2011. Ganó dos títulos en los juegos continentales de Toronto 2015, en trampolín de tres metros individual y sincronizado.
Hace cuatro años tuvo una destacada actuación en las preliminares en los Juegos Olímpicos de Río 2016. Un mal inicio en la final lo alejó de las medallas, de lo cual pensaba tomar desquite en Tokio.
Hace unas horas Pacheco reconoció que tenía la disyuntiva de seguir los entrenamientos o saltar a la política, con una diputación federal en Yucatán. Aseguró que si hoy día hubiera una ruleta para saber si los juegos de Tokio se van a realizar o no, lo más probable es el anuncio de que no se efectuarán.
En caso de continuar su carrera como deportista, Pacheco tendrá que cumplir una destacada actuación ante contrarios de nivel mundial en los selectivos. El equipo de México espera ganar algunas medallas en los próximos Juegos Olímpicos.
EFE
