El vicepresidente Mike Pence no planea invocar la 25ª Enmienda pese a los llamados de los demócratas y algunos republicanos en el Congreso de destituir al presidente Donald Trump antes del 20 de enero, informó The New York Times el jueves.
Luego de que partidarios de Trump irrumpieron el miércoles en el Capitolio en un intento por frustrar la certificación del triunfo de Joe Biden, varios congresistas reprobaron que el presidente incitara a la turba horas antes de que ésta ingresara al inmueble, y pidieron remover al mandatario.
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Los principales líderes demócratas en el Congreso instaron a Pence a invocar la 25ª Enmienda, que permite que el vicepresidente y la mayoría del gabinete declaren al presidente no apto para el cargo, pese a que al mandato de Trump le quedan menos de dos semanas.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, dijo el jueves en una conferencia de prensa que está esperando una decisión del vicepresidente y de otros miembros del gabinete. La demócrata advirtió que si Pence no invoca la 25ª Enmienda, el Congreso podría estar preparado para seguir adelante con un juicio político.
El vicepresidente aún no ha informado al Congreso de su decisión, pero ésta contó con el apoyo de varios integrantes del gabinete de Trump, de acuerdo con un republicano de alto rango que habló con el New York Times.
Biden deja decisión sobre destituir a Trump al actual gabinete
Andrew Bates, el asistente de transición de Joe Biden, dijo el jueves que el presidente electo dejará que el actual gabinete decida si destituir o no al presidente Trump invocando la enmienda, apuntando que ambos están “concentrados en su deber”.
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“Lo dejarán en manos del vicepresidente Pence, el gabinete y el Congreso para que actúen como mejor les parezca”, indicó Bates, calificando el comportamiento de Trump ante los disturbios en el Capitolio como “repugnante”.
