El número de estadounidenses que solicitó por primera vez ayuda por desempleo cayó inesperadamente la semana pasada, pero siguió siendo alto cuando se cumplen más de nueve meses de la crisis sanitaria y económica provocada por la pandemia de coronavirus.
Las solicitudes iniciales de beneficios estatales por desempleo bajaron a un total desestacionalizado de 787 mil en la semana al 26 de diciembre, tras las 806 mil de la semana previa, dijo el jueves el Departamento del Trabajo. Economistas consultados por Reuters habían proyectado 833 mil solicitudes.
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Aunque los pedidos semanales de ayuda han caído desde un récord de 6 mil 867 millones en marzo, permanecen de manera obstinada por encima del máximo de 665 mil de la Gran Recesión de 2007-09.
El informe, considerado el dato más al día de la salud económica estadounidense, fue consistente con otras débiles cifras económicas recientes, incluida una caída de la confianza del consumidor a un mínimo de cuatro meses en diciembre y declives tanto en el gasto como el ingreso el mes pasado.
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Ayer, el líder de la mayoría en el Senado, el republicano Mitch McConnell, cerró la puerta a la propuesta del presidente Donald Trump de que los cheques de asistencia por coronavirus sean de 2 mil dólares, afirmando que el Congreso ha proveído suficiente ayuda por la pandemia, y bloqueó otro intento de los demócratas para forzar una votación.
McConnell dejó claro que no está dispuesto a ceder, a pesar de la presión política de Trump e incluso de algunos senadores republicanos que exigían actuar. El presidente de Estados Unidos quiere que se aumente la asistencia de 600 dólares aprobada recientemente. Pero McConnell rechazó la propuesta porque, señaló, el dinero iría a parar a muchos hogares que no lo necesitan.
Con información de Reuters y AP
