Callum Smith estaba en primera fila cuando su hermano fue demolido por Saúl Álvarez en una dura pelea por el título supermediano en el 2016, en Arlington, Texas.
Smith recuerda especialmente la precisión de los golpes del ‘Canelo’, la forma en que el mexicano colocó a su hermano mayor, Liam, en posición para derribarlo tres veces, la última de ellas con un brutal golpe al cuerpo.
“Él encuentra brechas que ti no sabes estás dejando”, dijo Smith de Álvarez. “Supe entonces, y lo sé ahora, lo bueno que es”.
Cuatro años más tarde, es tiempo para una revancha familiar.
Smith está en la pelea más grande de su carrera el sábado, cuando tratará de hacer lo que solamente ha logrado un boxeador, Floyd Meayweather: vencer a Álvarez, un campeón mundial de cuatro divisiones que, para muchos, es el mejor boxeador kilo a kilo en el mundo.
Sería una de las victorias más sensacionales en la historia del boxeo británico, catapultando a Smith —un púgil invicto de 30 años procedente de Liverpool— al súper estrellato.
Smith tendrría además gran satisfacción si puede vencer al conquistador de uno los miembros de su familia, inmersa en el boxeo. Y no sería la primera vez: En el 2018 noqueó a George Groves, que previamente había vencido a Paul, el hermano mayor de Smith, para capturar la corona supermediana de la Asociación Mundial de Boxeo.
“Lo hice con Groves por Paul, con suerte, lo puedo hacer con ‘Canelo’ por Liam”, dijo Smith.
“Le añade un extra a la pelea. Hay un poco de historia y sería bueno tener revancha, pero primero tengo una tarea, vencer a ‘Canelo’ Álvarez. Lo otro es adicional”.
Paul, Liam y otro hermano que es también boxeador profesional, Stephen, acompañan a Callum en su viaje a Texas para la pelea en el Alamodome en San Antonio. Los hermanos o hacen todo juntos — los cuatro han sido campeones británicos en algún momento, con Liam y Calum ganando cetros mundiales — y se aconsejan mutuamente.
Y Liam, con su historial con ‘Canelo’, ha estado aconsejando a Callum en las últimas semanas.
“He visto cada pelea que ha tenido ‘Canelo’, pero es diferente cuando estás en el cuadrilátero con él. Liam ha estado ahí con él, así que sabe ciertas cosas. Cosas que probablemente descubrió esa noche que no sabía antes.
“Nosotros hablamos antes de que se fijase esta pelea y hemos hablado mucho desde entonces. Él está en el gimnasio conmigo todos los días, así que cuando estoy entrenándome, Liam está mirando. Siempre está ahí para aconsejarme, para decirme los golpes que él piensa que Canelo pudiera usar contra mí y los que él piensa que yo puedo capitalizar contra ‘Canelo’”.
La pelea será la primera para ambos púgiles en más de un año, desde que Canelo noqueó a Serguei Kovalev en noviembre del 2019 y Smith venció por decisión unánime a John Ryder tres semanas después.
Smith, que es casi 18 centímetros (7 pulgadas) más alto que Álvarez y tiene una clara ventaja en alcance, tuvo que apresurarse para conseguir rivales de entrenamientos y los que consiguió no eran ideales.
“Me preguntas si mis entrenamientos fueron ideales, pero probablemente los de él tampoco lo fueron… Él probablemente supo que iba a pelear conmigo antes que yo, pero ha tenido el mismo año que todo el mundo. Ha sido frustrante para todos los boxeadores”.
Pelear fuera de Inglaterra, ante una concurrencia reducida en Texas, no asusta a Smith. Después de todo, fue en Arabia Saudí donde venció a Groves para ganar el título mundial.
“Sea delante de 100,000 fanáticos, 10,000 o 10, mi objetivo es ganar. Sería bueno hacerlo a lleno completo y con muchos fanáticos que me apoyen, pero estos son los tiempos que vivimos. Tienes que tomarla como viene”, puntualizó.
AP
