Biden nominará a Lloyd Austin como secretario de Defensa; sería el primer afroamericano en el cargo

Cámara baja avala una vía rápida para el nominado de Biden al Pentágono
Foto: AP

AP. – El presidente electo Joe Biden nominará al general de cuatro estrellas retirado Lloyd J. Austin para que sea secretario de Defensa, de acuerdo con cuatro personas al tanto de la decisión. 

De confirmarse en el Congreso, Austin sería el primer afroamericano al frente del Pentágono.

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Biden eligió a Austin por encima de la favorita, Michele Flournoy, ex alta funcionaria del Pentágono y simpatizante de Biden que hubiera sido la primera secretaria de Defensa en la historia del país, y Jeh Johnson, ex asesor legal general del Pentágono y exsecretario de Seguridad Nacional.

La inminente nominación de Austin fue confirmada el lunes por cuatro personas con conocimiento de la elección que hablaron con The Associated Press bajo condición de anonimato porque Biden no ha anunciado su decisión.

Austin, de 67 años, probablemente enfrentará la oposición de algunos en el Congreso y en el sistema de defensa que creen en trazar una línea clara entre el liderazgo civil y militar del Pentágono. Aunque muchos secretarios de Defensa anteriores han servido brevemente en el Ejército, únicamente dos, George C. Marshall y James Mattis, han sido oficiales de carrera. Marshall también se desempeñó como secretario de Estado.

Al igual que Mattis, Austin necesitaría obtener una exención del Congreso para fungir como secretario de Defensa. El Congreso prohíbe que un oficial militar recientemente retirado ocupe el cargo.

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Biden conoce a Austin al menos desde los años en que el general lideró las tropas estadounidenses y de la coalición en Irak mientras el demócrata era vicepresidente. Austin fue comandante en Bagdad del Cuerpo Multinacional-Irak cuando Barack Obama fue elegido presidente, y regresó para liderar las tropas estadounidenses desde 2010 hasta 2011.

Austin también se desempeñó en 2012 como el primer afromericano vicejefe de personal del Ejército, la posición número dos del servicio. Un año después, asumió el mando del Comando Central de Estados Unidos, donde diseñó y comenzó a implementar una estrategia militar para hacer retroceder a los militantes del Estado Islámico en Irak y Siria.

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