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Mientras Donald Trump se ha recluido del ojo público sin dejar de lanzar acusaciones en Twitter sobre un supuesto fraude electoral, su equipo legal no ha logrado presentar pruebas de ello ni ganar terreno en las cortes.
En tanto, los gobiernos estatales han comenzado a certificar la victoria electoral de Joe Biden y el demócrata allana el camino para convertirse en el próximo presidente de Estados Unidos.
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Trump y sus aliados han obtenido sólo una victoria clara, pero menor, en las casi tres docenas de demandas postelectorales que han presentado hasta ahora en tribunales locales, estatales y federales de Arizona, Georgia, Michigan, Nevada y Pennsylvania, estados en los que Biden ganó.
Previendo que Pennsylvania sería el punto de inflexión en las elecciones, los abogados de la campaña de Trump se prepararon para impugnar los votos en varias partes del estado.
En las últimas semanas, sin embargo, los abogados del actual presidente han reconocido en varias ocasiones que no han obtenido ninguna evidencia concreta de un fraude electoral.
El equipo de Trump ha presentado al menos siete demandas importantes en este estado: cinco ante cortes estatales y dos ante autoridades federales. De ellas, sólo ha ganado una.
La demanda que ha significado la única victoria de Trump ante los tribunales fue en la que acusó a la secretaria de Estado de Pennsylvania, Kathy Boockvar, de extender ilegalmente la fecha límite para obtener información faltante en los votantes por correo. Para la sorpresa de muchos, un juez de apelación falló a favor de Trump y dictaminó que Boockvar no tenía autoridad para cambiar la fecha límite.
Apenas este sábado, un juez federal desestimó la demanda más importante que la campaña del mandatario saliente había presentado en Pennsylvania, y le dejó prácticamente sin opciones para revertir el resultado de las elecciones en este estado clave.
La demanda pretendía desestimar millones de votos por correo y la decisión del juez Matthew Brann implica que los condados de Pennsylvania tienen vía libre para certificar este lunes el resultado de las elecciones, y confirmar la victoria de Biden.
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De las dos demandas relevantes que ha presentado en Michigan, una ante una corte estatal y otra ante un juez federal, Trump no ha ganado ninguna.
El 13 de noviembre, un juez estatal desmanteló metódicamente el testimonio de seis testigos que afirmaban haber observado irregularidades en el recuento de votos en Detroit.
En un caso separado sobre los votos por correo, un abogado de la campaña de Trump presentó inicialmente la demanda por error en un tribunal federal de reclamos en Washington, DC, que carecía de autoridad para analizarla.
En este estado, la campaña de Trump alegó que algunas boletas fueron rechazadas erróneamente porque los votantes usaron plumones Sharpies para llenarlas. A pesar de que el rumor se volvió viral en las redes sociales, el propio Departamento de Seguridad Nacional lo desmintió.
“¡No promuevas la desinformación! Deja de difundir las ideas de un #SharpieGate”, dijo Chris Krebs, director de la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Ciberseguridad del Departamento de Seguridad Nacional.
Los republicanos en el estado retiraron la demanda sobre los plumones Sharpie el pasado sábado.
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En este estado, donde en un inicio parecía que iba a ganar, Trump tampoco ha logrado anotarse ninguna victoria legal.
Un juez de Georgia desestimó la semana pasada una demanda del republicano que acusaba que se habían recibido boletas después de la hora límite el día de la elección. La demanda se basaba en el testimonio de un observador electoral de su partido, que luego no pudo dar ninguna prueba al respecto.
En Nevada, los republicanos presentaron una demanda que, de haber tenido éxito, habría retrasado considerablemente el conteo de votos.
Sin dar pruebas, la campaña de Trump acusó que hubo irregularidades en la votación del condado de Clark, el más poblado del estado. Argumentó que no se deberían haber usado máquinas para verificar las firmas en las boletas, pero el juez federal Andrew Gordon rechazó el caso.
Días antes, el equipo legal de Trump también presentó una demanda para detener el conteo de las boletas enviadas por correo en el condado de Clark, pero tampoco tuvo éxito.
Este viernes, las autoridades electorales de Georgia confirmaron la victoria de Biden en el estado, tras un recuento manual y una auditoría de todas las boletas recibidas.
En otros estados donde Trump perdió, pero donde ha intentado impugnar la elección, está prevista la certificación de los resultados en los próximos días. En Michigan y Pennsylvania la fecha límite es el próximo lunes 23, y en Arizona, Nevada y Wisconsin, entre el 30 de noviembre y el 1 de diciembre.
Mientras tanto, pese a la negativa de Trump de cooperar con el proceso de transición del poder, Biden ya prepara el terreno para convertirse en el presidente número 46 de Estados Unidos el próximo 20 de enero. Ya confirmó a Ron Klain como jefe de su gabinete y se prepara para anunciar más nombramientos la próxima semana.
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