El secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, dijo el lunes que líderes republicanos, incluido el senador Lindsey Graham, lo han presionado a anular votos legales para que el presidente Donald Trump derrote a Joe Biden en ese estado.
En una entrevista con The Washington Post, Raffensperger, un republicano, dijo que Graham le preguntó el viernes pasado si tenía la autoridad para rechazar papeletas en condados con altas tasas de firmas que no coinciden. Graham, de acuerdo con Raffensperger, también cuestionó si los funcionarios electorales aceptaron boletas con firmas que no coincidían por preferencias políticas.
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Graham negó haber sugerido que Raffensperger debía anular votos legales, calificando las acusaciones del funcionario como “ridículas” al hablar con reporteros en Capitol Hill el lunes por la noche. Pero dijo que buscó a Raffensperger para comprender los requisitos del estado para aceptar papeletas.
“Pensé que fue una buena conversación. Me sorprende que la describa de esa manera”, dijo Graham.
Raffensperger igualmente le dijo al Washington Post que está frustrado por los esfuerzos para impugnar los resultados de las elecciones porque él y su esposa han recibido amenazas de muerte, incluida una que decía: “Es mejor que no arruines este recuento. Tu vida depende de ello”.
“Además del enojo, también es muy desilusionante”, comentó el secretario de Estado de Georgia. “Tenemos que ser reflexivos y cuidadosos con lo que decimos”.
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El estado de Georgia está realizando un laborioso recuento manual de aproximadamente 5 millones de votos. En el conteo inicial, el presidente electo Joe Biden venció a Donald Trump por unos 14 mil sufragios.
El representante Doug Collins también está entre los republicanos que ha acusado a Raffensperger de no apoyar al partido por no respaldar las afirmaciones infundadas de que hubo un extenso fraude electoral.
Raffensperger respondió a las críticas de Collins asegurando que el representante “le está mintiendo a todos” y es un “candidato fallido”.
