Las pruebas rápidas de antígeno para detectar Covid-19 se comenzarán a aplicar la próxima semana en la Ciudad de México, pero tienen diferencias que van más allá del tiempo, en comparación con las pruebas PCR para identificar si una persona se contagió con el virus SARS-CoV-2.
Ambas pruebas fueron aprobadas por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) en México y también tienen el aval de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA).
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La prueba PCR es una muestra molecular, esto significa que detecta el material genético del virus en el organismo. Mientras que la prueba de antígeno detecta proteínas específicas en el virus.
La prueba viral, molecular, de RT-PCR o PCR. Se analiza con la técnica de laboratorio “reacción en cadena de la polimerasa”. Para su realización se toma una muestra de la nariz o de la garganta con un hisopo largo. Los resultados pueden estar en pocos minutos, y ser entregados el mismo día al paciente o hasta una semana después, dependiendo del laboratorio.
De acuerdo con la FDA, la prueba PCR es muy precisa y diagnostica una infección activa de coronavirus, pero no puede mostrar si la persona tuvo el virus anteriormente.
Para la prueba de antígeno también se toma una muestra de mucosidad de la nariz o de la garganta con un hisopo largo. Aunque los resultados positivos de esta prueba suelen ser precisos y más económicos, tienen más posibilidades de no detectar una infección activa de Covid-19. Aparte pueden arrojar falsos positivos que después tienen que ser confirmados con una prueba PCR.
Los resultados de la prueba rápida de antígeno pueden estar listas en minutos, mientras que las PCR pueden tardar días en el laboratorio.
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Las 250 mil pruebas de antígeno para la Ciudad de México están en proceso de adquisición, y se planea su uso para noviembre y diciembre, según informó la jefa de Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum. Se estima que el gasto sea de 40 millones de pesos.
