EFE.- El Vaticano publicó hoy la investigación sobre el ex arzobispo de Washington Theodore McCarrick, de 90 años, expulsado del sacerdocio y del colegio cardenalicio por el papa Francisco por abusos a menores.
La investigación detalla que Juan Pablo II y Benedicto XVI, a pesar de los continuos rumores, dejaron pasar el asunto, “al ser mal informados o no tener pruebas ciertas”.
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Para esta investigación judicial, que ha durado dos años, fue ordenada por Francisco en un gesto inédito y detalla que el actual papa conocía sólo “de oídas” los actos inmorales de McCarrick.
El Vaticano asegura que no se ha puesto ningún límite y que documentos de todos los departamentos de la Santa Sede han sido consultados, al tiempo que se han realizado hasta 90 entrevista.
Desestiman denuncias de las víctimas
El informe apunta un sistema de mala información por parte de los obispos y los nuncios al papa.
Se acusa de desestimación de las denuncias anónimas de las víctimas y falta de investigación del caso que escondía reiterados abusos sexuales y de poder de “un verdadero depredador”.
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El caso estalló cuando el ex nuncio en Estados Unidos, Carlo María Viganò, pidió en 2018, en una carta, la renuncia del papa Francisco al asegurar que éste conocía desde 2013 las acusaciones hacia McCarrick.
Francisco actuó con la primera denuncia
En el informe se explica que hasta 2017 a Francisco nunca se le entregó ningún documento o cartas anónimas sobre McCarrik y que nunca habló del tema con Benedicto XVI.
Pero el informe concluye que “papa Francisco había conocido sólo de oídas las acusaciones y rumores respecto a una “conducta inmoral con adultos” relativa al periodo anterior al nombramiento de McCarrik como arzobispo de Washington”.
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