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Funcionarios del equipo del presidente electo Joe Biden urgieron el lunes a la Administración de Servicios Generales (GSA) a reconocer el triunfo del demócrata frente a Donald Trump en los comicios para poder comenzar el proceso de transición.
La GSA postergó el inicio formal de la transición al declarar horas antes que aún no había hecho una “determinación” respecto al ganador de las elecciones presidenciales, evitando que el equipo de Biden pueda ponerse a trabajar.
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Citando lo que la agencia hizo durante el recuento electoral del año 2000, la GSA indicó que podría no tomar una decisión hasta que Trump ceda o hasta que el Colegio Electoral se reúna el próximo mes.
Ese recuento de Florida implicó un margen de 537 votos en el único estado que habría determinado qué candidato alcanzó los 270 votos electorales. Las ventajas de Biden en Wisconsin, Pennsylvania y Michigan, que lo empujaron por encima del umbral para ganar la carrera, son mucho más sustanciales y grandes que las de Trump en los mismos estados en 2016.
Los funcionarios del equipo de transición de Biden, durante una llamada con periodistas el lunes por la noche, no descartaron emprender acciones legales contra la GSA y dijeron que tienen “varias opciones”.
“Está claro que el presidente electo Joe Biden y Kamala Harris deberían tener derecho a todas las funciones de la GSA y a todas las funciones en todo el gobierno”, dijo uno de los funcionarios. “Le pedimos a la administradora de la GSA que realice una verificación adecuada”.
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El equipo de Biden evitó acusar a la administradora de la GSA, Emily Murphy, quien fue nombrada por Trump, de postergar la decisión por presión política, y no quiso dar detalles de las maniobras legales que podría implementar.
Con información de AP.
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