En las próximas semanas, Estados Unidos entrará a la peor fase de la pandemia de Covid-19, ya que el número de casos ha aumentado progresivamente, incluso, más que en los registros de abril.
En 24 horas, la Unión Americana alcanzó 73 mil 686 contagios, la cifra más alta desde julio.
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La extensión geográfica que ha alcanzado la pandemia en estos meses la hace más peligrosa de cara al invierno. Retomando el conteo de ayer, 12 estados superaron su récord diario de contagios. En las últimas dos semanas, 22 estados han rebasado su conteo diario.
Más de 170 condados en 36 estados fueron denominados “puntos críticos de rápido crecimiento” de Covid-19, según un informe federal obtenido por The Washington Post.
La semana pasada, las hospitalizaciones por coronavirus aumentaron en 38 de los 50 estados. El total de muertes diarias ha superado las mil en los últimos cinco días.
Los expertos advierten que los nuevos casos de Covid-19 podrían provocar una grave escasez de personal y suministros médicos. Los hospitales de Estados Unidos ya informan sobre la escasez de medicamentos básicos necesarios para tratar la enfermedad.
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Eleanor J. Murray, epidemióloga de la Universidad de Boston, advirtió el peligro de esta nueva ola porque se desconoce su alcance.
“Simplemente seguirá subiendo hasta que la gente y los funcionarios decidan hacer algo al respecto”, comentó la experta.
El alto número de casos diarios ha avivado las preocupaciones porque el país se acerca a los días festivos, como Halloween y Día de Acción de Gracias, que podrían significar más riesgo de contagio debido a las grandes congregaciones de personas.
El aire frío y seco del invierno, que comenzará hasta diciembre, provocará que el virus se mantenga vivo por más tiempo, de acuerdo con especialistas.
