El número de personas que buscaron ayuda económica federal por desempleo en Estados Unidos aumentó la semana pasada a 870 mil. Esto representa una subida de 10 mil solicitudes en comparación con la semana anterior.
El dato que presentó el Departamento del Trabajo muestra que la Covid sigue afectando a empresas y trabajadores estadounidenses a seis meses del inicio de la pandemia.
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Algunos estadounidenses recientemente despedidos se enfrentan a retrasos en la recepción de beneficios por desempleo. Las agencias estatales intensifican sus esfuerzos para combatir las solicitudes fraudulentas.
California ha dicho que dejará de procesar nuevas solicitudes por desempleo durante dos semanas, ya que busca reducir los retrasos. El gobierno de Pensilvania encontró que hasta 10 mil reclusos están recibiendo ayuda de manera indebida.
El Departamento de Trabajo señaló que la cantidad de personas que siguen recibiendo beneficios por desempleo se redujo a 12 millones 580 mil; esto significa una baja de 167 mil en comparación con la semana anterior.
La disminución de esta cifra significa que algunos de los desempleados ya son recontratados. Sin embargo, también indica que otras personas ya dejaron de recibir el apoyo económico, el cual dura seis meses en la mayoría de los estados.
Las solicitudes de ayuda para el desempleo se dispararon en la primavera tras el repentino cierre de negocios en todo el país, provocado por la pandemia de Covid-19.
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A medida que los estados han reabierto lentamente sus economías se ha recuperado aproximadamente la mitad de los puestos de trabajo que se perdieron inicialmente. Sin embargo, el crecimiento del empleo se ha ralentizado en algunos estados del país.
Este informe se presenta en el contexto de una recuperación económica inestable. Algunos indicadores como la vivienda, las compras minoristas y la venta de automóviles, han logrado generar ganancias sólidas.
