AP. – El presidente Donald Trump fue abucheado el jueves cuando fue a ofrecer sus respetos frente a los restos de la jueza de la Corte Suprema Ruth Bader Ginsburg.
El mandatario y la primera dama Melania Trump —ambos con cubrebocas— permanecieron de pie a la entrada de la sede del tribunal máximo de Estados Unidos, contemplando el féretro cubierto con la bandera estadounidense y rodeado de flores blancas.
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Poco después de la llegada del presidente, los abucheos comenzaron a oírse a la distancia. Mientras los gritos instando a “votar contra Trump” incrementaban, el mandatario ingresó al edificio.
Cuando la limosina del presidente regresaba a la Casa Blanca, también estallaron gritos de “¡Breonna Taylor!”, en referencia a la paramédica afroamericana que fue asesinada por policías que allanaron su hogar en Kentucky. El miércoles, un jurado declinó formular cargos contra los policías que le dispararon a Taylor.
El fallecimiento de Ginsburg, que era de tendencia liberal, le allana el camino a Trump para nominar un juez de conservador, a pesar de que faltan pocas semanas para las elecciones presidenciales.
Los restos de la jueza serán velados en el Capitolio el viernes, un honor nunca antes conferido a una mujer y sólo la segunda vez que se le otorga a un miembro de la Corte Suprema. El otro fue William Howard Taft, quien fue también presidente del país.
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Ginsburg será enterrada la semana entrante al lado de los restos de su esposo Martin, en el Cementerio de Arlington, durante una ceremonia privada.
El próximo sábado, Trump anunciará a quién nominará para reemplazar a Ginsburg. El mandatario ha indicado que eligirá a una mujer y busca que todo quede listo antes de las elecciones del 3 de noviembre.
Cientos de ciudadanos estuvieron frente a la Corte Suprema el jueves en un duelo colectivo por el fallecimiento de la jueza.
