Foto: PAN
Ante las acusaciones del presidente Andrés Manuel López Obrador de que el Partido Acción Nacional (PAN) estuvo detrás de las manifestaciones en la presa La Boquilla, en Chihuahua, Marko Cortés, dirigente nacional del PAN, dijo que “el león cree que todos son de su condición” y pidió al gobierno federal resolver el problema.
En Twitter, el dirigente nacional escribió que las manifestaciones de ayer son “una demanda genuina de las y de los chihuahuenses”. “Mejor resuelva el conflicto que, por cierto, su gobierno creó”, apuntó el político.
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La declaración de Cortés llega luego de que el presidente López Obrador, durante su conferencia matutina, acusó que dirigentes del PAN y exgobernadores de Chihuahua habían orquestado la manifestación que provocó un enfrentamiento entre campesinos y elementos de la Guardia Nacional que dejó al menos dos agricultores muertos.
“En la mañana se reunieron exgobernadores de Chihuahua, dirigentes del PAN. Encabezaron un mitin y luego hubo una marcha hacia la presa, ya que ellos ya no fueron, pero repartieron palos y tomaron la presa”, señaló el mandatario.
López Obrador agregó que también hubo otro enfrentamiento en otra presa por lo que consideró que “fue algo bastante bien orquestado”.
“Intervienen muchos intereses, no sólo la cuestión política. Hay también una especie de huachicol con el agua, es el agua de dominio de la nación, corresponde a la federación su manejo”, mencionó desde Palacio Nacional.
Ayer, al menos cinco mil agricultores y pobladores del centro sur de Chihuahua expulsaron a elementos de la Guardia Nacional que resguardaban la presa La Boquilla.
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El conflicto se originó el domingo pasado cuando la Comisión Nacional del Agua (Conagua) incrementó la extracción de 30 metros cúbicos por segundo de agua de la presa La Boquilla, ubicada en el municipio de San Francisco de Conchos, Chihuahua.
Lo anterior provocó el enojo de los agricultores y pobladores, ya que desde que comenzó el año han solicitado que se frene la extracción de agua de las presas en la entidad para el pago del Tratado de Aguas Internacionales, firmado en 1944 entre México y Estados Unidos.
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