Reuters. – Al menos 33 estados continúan recomendando realizar pruebas a las personas que han estado expuestas al coronavirus y que no presentan síntomas, ignorando las nuevas directrices de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, que califican a dichas pruebas de innecesarias.
Entre los estados que rompieron con estas medidas del gobierno federal están Texas, Oklahoma y Arizona, de tendencia republicana.
También puedes leer: La FDA está dispuesta a acelerar la aprobación de una vacuna contra el coronavirus
Dieciséis estados no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios de Reuters, y Dakota del Norte dijo que no había tomado una decisión.
Cambios podrían afectar la reputación de los CDC
Los expertos en salud pública dijeron que un cambio de esta magnitud en los CDC puede no tener precedentes y advirtieron que podría llevar a una mayor desconfianza en la administración de Donald Trump.
Los CDC dijeron el lunes que las personas expuestas al coronavirus, pero que no tienen síntomas, “no necesariamente deben hacerse una prueba”.
Antes, recomendaban realizar pruebas a todas las personas que tuvieron contacto cercano con alguien diagnosticado con coronavirus. Esa política continuará aplicándose en al menos 30 estados, mientras que tres más estudiarán la guía de la agencia antes de tomar una decisión.
El almirante Brett Giroir, miembro del equipo de trabajo de la Casa Blanca para combatir la pandemia, dijo en un comunicado que los cambios fueron “para reflejar la evidencia actual y para enfatizar aún más “el uso de estrategias de prevención aprobadas por los CDC”.
Te puede interesar: La Casa Blanca ordenó los cambios en pautas de los CDC para pruebas de Covid-19
Algunos líderes estatales y expertos acusan a la administración de Trump de utilizar la política en lugar de la ciencia al planear la respuesta a la pandemia.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, indicó que los cambios en las recomendaciones de la agencia fueron “imprudentes” y advirtió que “podrían causar un daño a largo plazo en la reputación de los CDC”.
