EFE.- El Departamento de Justicia (DOJ) de Estados Unidos acusó este jueves a la Universidad de Yale de discriminar a aplicantes asiáticos y blancos en su proceso de admisión de pregrado, lo que consideró una violación a la Ley de Derechos Civiles de 1964.
El departamento publicó los hallazgos de una investigación que abrió hace dos años “en respuesta a una queja de grupos asiáticos-estadounidenses” sobre la conducta de la prestigiada universidad.
También puedes leer: Facebook refuerza la lucha contra la desinformación electoral en Estados Unidos
“Yale discrimina por motivos de raza y origen nacional en su proceso de admisión de estudiantes universitarios, y que la raza es el factor determinante en cientos de decisiones de admisión cada año”, puntualizó la entidad en un comunicado.
De acuerdo con la nota, la gran mayoría de los estudiantes de origen asiático y blanco “tienen únicamente entre una décima y una cuarta parte de las probabilidades de ser admitidos” frente a “solicitantes afroamericanos con credenciales académicas similares”.
“Ya es hora de que las instituciones estadounidenses reconozcan que todas las personas deben ser tratadas con decencia, respeto y sin considerar ilegalmente el color de su piel”, afirmó el fiscal general adjunto de la División de Derechos Civiles, Eric Dreiband.
Para el funcionario, “no existe una forma agradable de discriminación racial”, y apuntó que la división de los estadounidenses en bloques racionales y étnicos “fomenta los estereotipos, la amargura y la división”.
Te puede interesar: Trump debería estar entre los candidatos al Premio Nobel de la Paz, dice asesor
Como resultado de la investigación, el Departamento de Justicia alega haber encontrado que Yale violó un artículo de la Ley de Derechos Civiles de 1964, que es un requisito para recibir millones de dólares en fondos de los contribuyentes.
En una declaración al diario The Washington Post, Yale descartó los señalamientos y anticipó que no cambiará sus prácticas de admisión por “una acusación sin mérito y tan apresurada”.
“Estamos consternados de que el DOJ haya tomado esa determinación antes de permitir que Yale proporcione toda la información que el departamento ha solicitado hasta ahora”, puntualizó la institución.
