Víctor Guzmán, mediocampista del Pachuca, ya puede volver a las canchas, luego de que en 2019 dio positivo en un control antidopaje, y a principios del Clausura 2020 cuando estaba por debutar con las Chivas, se dio a conocer que quedaba inhabilitado.
El Pachuca informó este martes que el jugador “ha quedado habilitado por las autoridades correspondientes para poder integrarse a nuestra institución a partir del 11 de agosto”.
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— Club Pachuca (@Tuzos) August 11, 2020
El futbolista, quien estaba entrenando con los Tuzos desde que regresó de Guadalajara, deberá someterse a exámenes médicos y pasar por una etapa de acondicionamiento físico para ser tomado en cuenta para el Guard1anes 2020.
“Víctor Guzmán es un jugador y una persona importante para nuestra institución y deseamos de corazón pronto retome su nivel futbolístico para el bien del club y de la afición”, se lee en el comunicado de los Tuzos.
ESCÁNDALO Y CHIVAS LO REGRESA
De cara al Torneo Clausura 2020, el Guadalajara consiguió la recompra de su canterano Víctor Guzmán por una cifra extraoficial que rondó entre los 10 y 12 millones de dólares.
De los siete refuerzos del equipo, Guzmán lucía como el más prometedor, pero todo se empezó a descomponer porque de forma misteriosa antes del debut en la Fecha 1, se descartó la convocatoria del jugador y Chivas no tuvo un pronunciamiento oficial al respecto, salvo el argumento del entonces técnico Luis Fernando Tena de que se trataba de “un tema personal”.
De inmediato comenzaron las especulaciones y fue cuestión de un par de días para que se informara que el mediocampista registró “un resultado analítico adverso en un control antidopaje” que se realizó el 10 de agosto, después del partido Querétaro-Pachuca del Torneo Apertura 2019.
Brotó el escándalo y la transferencia del ‘Pocho’ a las Chivas se anuló, al tiempo de que los Tuzos presuntamente tuvieron que devolver dos millones de dólares que habían recibido de adelanto por el jugador.
Los controles de la Liga MX se realizan en el Laboratorio Antidopaje de La Habana, Cuba, acreditado por la Agencia Mundial Antidopaje, y de acuerdo con el protocolo, cuando un deportista tiene un resultado analítico adverso, puede solicitar la apertura de la muestra ‘B’.
Si se confirma la presencia de la sustancia prohibida se convierte en dopaje positivo y el atleta se somete a un juicio para determinar su sanción.
En ese compás de espera y sufrimiento estuvo el futbolista, quien recibió el respaldo del Pachuca y negó vía redes sociales haber ingerido alguna sustancia prohibida… A menos de forma premeditada.
“Desde siempre he sido un jugador que ha rechazado cualquier práctica antideportiva y he manifestado mi apoyo a la lucha antidopaje. Es por ello que esta situación en que me veo envuelto me resulta absolutamente increíble y me apena enormemente.
“Procederemos a solicitar el análisis de la prueba B con la esperanza de que se demuestre tras su apertura que ha sido todo un terrible error y que yo pueda continuar ejerciendo mi profesión. En todo caso, quiero dejar claro que nunca he tomado ninguna sustancia para mejorar mi rendimiento deportivo y voy a luchar hasta el final para demostrar mi inocencia y así poder seguir haciendo aquello que más me gusta y me hace feliz: jugar al futbol”, escribió en su momento el tapatío.
De acuerdo con el Código Mundial Antidopaje, en caso de que la muestra ‘B’ resultara positiva, Víctor iba a enfrentar una sanción de dos a cuatro años de suspensión, la cual podía reducirse hasta en un 75 por ciento si demuestra que el consumo de la sustancia no fue premeditado.
En aquellas fechas, el titular de la Liga MX, Enrique Bonilla, reveló que fue un alcaloide, sin especificar cuál, lo que se le encontró al jugador en la muestra, por ello estaba inhabilitado, a la espera de recibir fecha para ir a La Habana y estar presente cuando se revisara la prueba ‘B’.
El Pachuca no informó detalles sobre el castigo que se le impuso a Víctor y si todo quedó en seis meses de suspensión, lo cual es altamente probable, pues el 13 de enero del presente año la Liga MX anunció que estaba inhabilitado para jugar.
