EFE.- Las dosis de la vacuna creada por el laboratorio chino Sinovac llegaron este lunes a la ciudad de Sao Paulo, Brasil, para ser probada en 9 mil voluntarios, todos ellos trabajadores de la área de la salud.
La vacuna china, cuya aplicación estará coordinada por el Instituto Butantan, el principal centro referente inmunológico de Brasil, aterrizó la madrugada de ayer lunes, en el Aeropuerto Internacional de Guarulhos, localizado en Sao Paulo, proveniente de un avión que despegó desde Frankfurt, Alemania.
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En las redes sociales, el gobernador del estado paulista, Joao Doria, celebró la llegada de las dosis y aseguró tener un “sentimiento de esperanza en dar este paso importante en la batalla contra el Covid-19“.
Las pruebas, que tienen un coste estimado de 85 millones de reales (unos 15 millones millones de dólares), se realizarán en 12 centros de investigación del país, encargados de probar su eficacia y verificar si existe el estímulo de producción de anticuerpos para la protección contra el virus.
El acuerdo con el laboratorio Sinovac prevé que, en caso de ser efectiva, el gigante suramericano pueda contar con 60 millones de dosis para su distribución, sin tener la necesidad de comprarla al exterior.
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La CoronaVac es la segunda vacuna que, estando en la tercera y última fase antes de su homologación, fue autorizada para ser probada en el país por la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), el órgano regulador del Gobierno brasileño.
Ya a mediados de junio, empezaron los ensayos clínicos de la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford, en el Reino Unido, que será probada en un total de 5 mil brasileños, bajo la conducción de la Universidad Federal de Sao Paulo (Unifesp) y la Fundación Lemann.
