El FBI informó que está investigando el hackeo de cuentas de Twitter que ocurrió el miércoles, luego de crecientes preocupaciones por los riesgos de seguridad que la plataforma podría estar enfrentando.
En un comunicado, la agencia federal anunció que comenzó la investigación y dijo que todo parece indicar que las cuentas fueron comprometidas para perpetuar el fraude de criptomonedas, por lo que pidió a la gente no enviar dinero a esta estafa.
Una ola de tuits de cuentas hackeadas inundó Twitter el miércoles, cuando más de media docena de personajes relevantes, entre ellos el candidato presidencial estadounidense Joe Biden; el exmandatario, Barack Obama, el multimillonario Bill Gates, o el rapero Kanye West, pidieron donaciones en bitcoins.
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Las acciones de Twitter cayeron tras el ataque y la empresa, en una medida extraordinaria, impidió temporalmente a muchas cuentas verificadas publicar mensajes mientras investigaba la violación.
Los registros de las cadenas de bloqueo disponibles públicamente muestran que los aparentes estafadores recibieron más de 118 mil dólares en criptomonedas.
El presidente ejecutivo Jack Dorsey dijo en un tuit el miércoles que fue un “día difícil” para todos en Twitter y afirmó que la firma compartirá “todo lo que podamos cuando tengamos un conocimiento más cabal de lo que pasó exactamente”.
Pero el hackeo probablemente volverá a atraer la atención de Washington hacia las compañías de redes sociales, que ya despertaron la preocupación de los críticos tanto de izquierda como de derecha.
“Un ataque exitoso a los servidores de su sistema representa una amenaza para la privacidad y la seguridad de los datos de todos sus usuarios”, escribió el senador republicano Josh Hawley en una carta enviada a Dorsey.
