Las autoridades de Serbia prohibieron este jueves las reuniones de más de 10 personas en Belgrado, la capital del país, tras dos noches de manifestaciones y 118 policías lesionados.
El equipo de crisis del gobierno de Serbia dijo que la restricción busca prevenir la propagación del virus tras los enfrentamientos, donde apenas se observaba el distanciamiento social.
No te pierdas: OMS crea comité para investigar el manejo de la crisis por Covid
Con esta medida se espera frenar la protesta programada este jueves. Sin embargo, y para evitar más disturbios, la policía reforzó su presencia en la capital y alrededor del edificio del parlamento.
Además de limitar las reuniones, se ordenó a las empresas en espacios cerrados –cafeterías, centros comerciales o tiendas– reducir sus horarios de servicio.
Aunque las nuevas medidas gubernamentales aprobadas el jueves no incluyen un toque de queda, el límite de reuniones sí implica una prohibición de protestas.
Tras manejar la pandemia relativamente bien, el gobierno ha sido acusados de permitir que la crisis se descontrole previo a las elecciones del 21 de junio.
En las últimas dos noches, los manifestantes arrojaron rocas contra la policía, mientras que ellos respondieron con gases lacrimógenos, vehículos blindados y caballos para dispersarlos.
Ambas protestas comenzaron pacíficamente antes de que grupos nacionalistas de extrema derecha comenzaran los disturbios.
No te pierdas: UE apuesta por el plasma sanguíneo para desarrollar terapia contra el Covid-19
El jefe de policía de Serbia, Vladimir Rebic, dijo que el saldo de los disturbios es de 118 policías heridos y 153 manifestantes detenidos.
“Tal violencia es inadmisible y la policía usará todos los medios para detenerla”, dijo la primera ministra de Serbia, Ana Brnabic.
Con información de AP.
