El papa Francisco afirmó el domingo que la crisis que provocó el coronavirus incrementó la necesidad de proteger a las personas refugiadas y pidió que, con la vuelta a las actividades tras el confinamiento, la gente continúe protegiendo el medioambiente.
Tras el rezo dominical, Francisco recordó que el sábado las Naciones Unidas celebraron el Día Mundial de los Refugiados. Por ello, exhortó a un empeño renovado y eficaz de todos en favor de la protección efectiva de cada ser humano, particularmente la de quienes “han tenido que huir debido a situaciones de grave peligro para ellos o sus familias”.
El pontífice argentino agregó que “otro aspecto sobre el que la pandemia nos ha hecho reflexionar es la relación entre el hombre y el medio ambiente”.
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El papa Francisco dijo que la cuarentena “ha reducido la contaminación y ha redescubierto la belleza de muchos lugares libres de tráfico y ruido”.
“Ahora, con la reanudación de las actividades, todos deberíamos ser más responsables de cuidar el hogar común”, pidió el pontífice para después alabar a todas las iniciativas que fomentan “una ciudadanía cada vez más consciente de este bien común esencial”.
Por otra parte, el papa Francisco recordó que hoy en su país natal, Argentina, y en otras partes del mundo se celebra el Día del Padre.
El pontífice argentino aseguró que “ser papá no es un trabajo fácil”, por lo que pidió rezar por ellos. Además, quiso recordar a todos “nuestros padres que continúan protegiéndonos desde el cielo”.
