Borgetti le gana el cabezazo a Maldini. (Foto: Mexsport).
Fueron 17 toques sin respuesta de los italianos. Un golazo de ‘toda la cancha’ concretado por Jared Borgetti con un remate prodigioso en el que giró 180 grados la cabeza para dejar como estatua a Gianluigi Buffon.
La jugada inició en el área mexicana con una barrida de Salvador Carmona sobre ‘Pipo’ Inzaghi, a quien le robó una oportunidad manifiesta de gol.
A partir de ese momento, Gerardo Torrado inició la salida nacional con Rafa Márquez, y el balón fue del centro a la izquierda, de izquierda a derecha en donde Jesús ‘Cabrito’ Arellano intentó desbordar pero estaba marcado por dos toros italianos, por lo que retrasó el balón para Cuauhtémoc Blanco, y el avance de nueva cuenta fue hacia el otro costado con Ramón Morales, quien tocó para Braulio Luna y éste al ‘Temo, que con gran visión buscó a Jared Borgetti en el área… El goleador hizo el resto…
Se jugaba el minuto 34 del tercer partido de la Fase de Grupos del Mundial Corea-Japón 2002, y el Tri cumplía con un desempeño destacado ante la poderosa Italia, situación que se vio reflejada en el marcador tras un cabezazo de Borgetti, quien superó la marca de Paolo Maldini y dejó parado a Buffon.
“Yo le marco el pase a Cuauhtémoc para tratar de terminar la jugada, y cabecear era la mejor opción que tenía, porque la otra era tratar de bajar el balón y dar la media vuelta, pero bueno, rematé y el balón con la inercia que traía hace un poco de curva y Buffon no se esperaba el remate. De inmediato salí corriendo en el festejo y se me puso la piel chinita”, relató tiempo después en una entrevista el originario Culiacán, Sinaloa.
“Han pasado 18 años y aún se me pone la piel chinita al recordar la euforia en el estadio. Para muchos es el mejor gol de @miselecciónmx en Mundiales, para otros una obra de arte, para mí un grandioso recuerdo que podría ver todo el día”, escribió hoy Jared en su cuenta de Twitter.
Aquel cotejo culminó con un injusto empate 1-1, pues Alessandro del Piero en la agonía del juego anotó el tanto para los ‘Azurri’, que terminaron pidiendo el tiempo ante un lúcido Tricolor, en el entendido de que a ambas selecciones les valía el punto para avanzar.
El 13 de junio de 2002 es recordado no solo por el lienzo del llamado ‘Zorro del Desierto’, también porque México cerró una primera ronda de Copa del Mundo de forma brillante y clasificó a Octavos de Final como primer lugar del Grupo G, por encima de Italia.
Fueron 17 toques sin respuesta de los italianos. Un golazo de ‘toda la cancha’ que selló Jared Borgetti con un giro de la mejor de sus armas: la cabeza…
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