Ada Hegerberg se convirtió en una figura mundial cuando ganó el primer Balón de Oro Femenino en diciembre de 2018. Con un discurso de aceptación que conmovio a todos, la noruega le hacía saber al mundo del futbol que las mujeres habían llegado para quedarse.
“Quisiera terminar este discurso con algunas palabras para todas las jóvenes niñas en el mundo: Por favor, crean en ustedes mismas”, expresó emocionada en la gala organizada por FIFA.
La delantera ha pregonado con el ejemplo, y gracias a sus actuaciones y goles ha firmado un contrato a largo plazo con Nike. La futbolista de 24 años había estado patrocinada por Puma desde 2014, cuando tenía 18 años. Ahora ganará poco más de un millón de dólares por “al menos” 10 años. La cifra todavía no se acerca a lo que ganan los hombres de su calibre, pero al menos ya comienza a estar en la conversación.
Sin embargo, su llegada a Nike no tiene que ver tanto con el dinero y sí con la visibilidad que la futbolista ganará al estar comprometida con una marca que da foco a las mujeres en el deporte.
En el pasado, las mujeres tomaban cualquier contrato de patrocinio porque tenían que hacerlo para subsistir. Hoy, con una gran confianza en sí mismas, buscan las mejores propuestas que se alineen con sus metas personales y profesionales.
Hegerberg ha dejado en claro que su objetivo principal es que el futbol femenino crezca. Hay que recordar que esta atleta prefirió no jugar el Mundial Femenil 2019 para protestar el trato que se le da al balompié femenil en su natal Noruega.
“Para mí, este es un paso sin precedentes en mi carrera. Siento que Nike ha inspirado a millones de personas y son los que han cambiado el juego cuando se trata de levantar a las mujeres en el deporte y poner la vara alta…Con suerte esta relación puede hacer historia en la cancha cuando esté de vuelta”, comentó la jugadora.
El gigante deportivo puso su característica palomita en el futbol femenil en 1992, cuando Joe Elsmore, un joven empleado de Nike, con un segundo empleo como árbitro, se reunió con Mia Hamm. Nike oficialmente la firmó en 1994, cuando terminó la universidad en Carolina del Norte y pudo pagar sus gastos. El catálogo de mujeres estrella ha crecido desde entonces con Abby Wambach, Alex Morgan, Carli Lloyd, Megan Rapinoe y Mallory Pugh entre sus filas.
Y ese compromiso con las atletas femeninas va más allá del futbol, la marca de Oregon cuenta con las campeonas de la WNBA Elena Delle Donne, Diana Taurasi, Breanna Stewart y Sue Bird, además de haber firmado a Sabrina Ionescu, quien es ya una una poderosa embajadora de marcas que expresan una postura en favor de la justicia social.
Estas súper atletas firmaron con Nike gracias a su talento, pero es justo decir que el marketing de la marca estadounidense les ha dado visibilidad, un estatus de estrellas y una plataforma.
Como precedente puede tomarse a Serena Williams, quien también había estado con Puma y llegó a Nike en 2003. Su alianza ha contribuido a formar un vasto imperio que incluye la moda, anuncios de empoderamiento femenino e inversiones en compañías propiedad de mujeres y/o minorías. Así es como Hegerberg puede continuar su lucha para lograr la igualdad de género en su deporte.
Con cuatro Champions League consecutivas y seis Ligas Femeninas Francesas con el Lyon, la noruega es hoy por hoy la mejor futbolista del mundo. Además es la líder de goleo de la competición europea con 53 goles. Por si fuera poco, su nombre ya quedó inscrito en la historia al convertirse en la primera mujer en ganar el Balón de Oro, con todo y la broma sexista de la que fue objeto durante la ceremonia.
Su tarea inmediata es regresar de una ruptura de ligamento cruzado anterior sufrida en enero, cuando la actividad se renanude tras la pandemia. Una vez que esté en forma, Hegerberg ha expresado su intención de tomar la estafeta de Rapinoe y Marta para seguir desarrollando y apoyando el futbol femenino.
Nike le da la posibilidad de seguir haciendo esto, pues su estrategia específica enfocada a la mujer puede ser una plataforma muy importante para el futuro.
